Sociedad

“La comunicación tiene que servir al pueblo para saber de dónde venimos y hacia dónde vamos”

Omar López, es periodista y conductor de Mate Amargo. A los 14 años hizo una revista para su barrio, llamada Verdad, dónde reclamaba que se hiciera el asfalto. Al año asfaltaron: “Ese fue mi primer triunfo, desde ahí nunca me detuve.”

Para López: A los grupos hegemónicos les preocupa perder el control del pensamiento crítico.

Por Anabel Acevedo   En este diálogo cara a cara, detalla el repentino alejamiento de Mate Amargo de Radio América. Habla sobre la importancia de generar un pensamiento crítico; el valor de la ley de medios; la responsabilidad de los periodistas y comunicadores de tener fuentes fiables, cotejar, estudiar e investigar las diversas hipótesis.   ¿A qué se debe el éxito de Mate Amargo? En el 2001 pasó a ser la referencia de todas las organizaciones sociales que luchaban con un gobierno que era agobiante en términos económicos y sociales. Hacíamos asambleas con cuatro mil o cinco mil personas. El proyecto Mate Amargo de comunicación, la revista, el programa que hicimos en canal 6 de Córdoba y ahora esta etapa con la idea de hacer radio por internet y un canal de TV. Este presente, donde trato de entender de qué se trata, de aprender. Porque me doy cuenta que se muy poco, hay que seguir investigando, aprendiendo, instruyéndose. Pero el mismo deseo de siempre, de dar batalla con un objetivo: que la comunicación sirva al pueblo para saber de dónde venimos y hacia dónde queremos ir, para eso tenemos que hacer un gran esfuerzo para comunicarnos democráticamente.   Me contaste que tu primer triunfo fue conseguir que se asfaltara la calle de tu barrio, ahora me decís de dar batalla ¿Te considerás un militante? De la comunicación democrática y popular si. Toda la vida traté de quedarme en ese lugar, me voy de Radio América siendo uno de los programas de mayor medición, dicho por Sergio Szpoltski que es el propietario. Mate tiene un público muy grande, yo estaba muy contento, y sorprendentemente, faltando un año de contrato, al volver de mis vacaciones me entero que me levantan el programa. Supongo que por muchas razones pero cuando uno ve gente del deporte que no ha tenido históricamente ningún compromiso con la democracia informativa y ocupa un tablero importante porque esto es un negocio… Me parece que uno tiene que atender las cuestiones en honor a la dignidad de los que luchan, que tratan de ser cada día mejor, de ser mejores comunicadores, más democráticos. No hay justicia para defender a quienes se han expuesto por un proyecto de comunicación democrática, plural, participativa y de pensamiento crítico. Mate Amargo, antes que el queridísimo Néstor Kirchner llegara había dado batallas en soledad. Hablábamos de la libertad de expresión, una nueva ley democratización -no por ser los mejores, ni únicos- sino porque nos habíamos expuesto a esa batalla que pagamos por no tener trabajo. Hoy, a la vuelta de la vida, es muy feo no sentirse reconocido, sino abandonado, no respetado -no por la trayectoria porque no creo ni en la trayectoria ni en los premios, el premio lo da la conciencia de querer vivir y luchar, y de ser digno y solidario de no traicionar a su pueblo. Ese es el mayor premio que uno tiene para su conciencia cuando está en frente de uno mismo -.  Pero es importante que haya un respeto, que más allá de un gobierno (que uno puede discutirle) ha cambiado la lógica de la devastación, del vaciamiento popular, del remate del país, de pensar un lugar no pensado desde los vientres de los grandes grupos económicos. Me parece muy triste que en lugar de valorar, hoy Mate Amargo no tenga aire. Muchos comunicadores que hoy están en el campo de las ideas se han formado acá. Volveremos tal vez a una radio importante a seguir haciendo lo que creemos que hacemos bien al servicio de la comunidad. Para que la sociedad tenga otra lectura o mirada.   Están acondicionando el espacio para lanzar radio por internet y armando un estudio de TV ¿Qué vinculación tienen estos proyectos con la constitucionalidad de la ley de medios? Hemos madurado mucho y pensado qué sentido tiene hacer una radio en internet, donde el lenguaje, la dinámica, la estructura narrativa -comparado con lo convencional de AM Y FM- es otro universo. Laburamos desde hace siete meses para preparar la radio y la vamos a lanzar en abril, con una idea que pueda estar vinculado a todos los que tienen internet, teléfonos inteligentes y todos los motores con los que pueda conectarse. Eso es la radio que vamos a tratar de comercializar para sostener un objetivo que es claro para nosotros, que es la fuente de ingreso para un grupo de gente. Con la TV pasa lo mismo, estamos rearmando la web de Mate que se va a poder ver por internet. Además, democratizar es saldar una asignatura importantísima de la historia argentina, para recategorizar el pensamiento crítico, la multiplicidad de voces, enormes y profundos cambios en la cultura de la sociedad. Pero, al mismo tiempo, te encontrás con un montón de vicisitudes que tenes que aprender a sortear. Donde por ambas partes hay muy poca experiencia, por parte del Estado y por parte de nosotros. Por ejemplo, con el tema del financiamiento, tenes que financiar una computadora especial para cargar programación o de edición de TV, son volúmenes, que solo están al alcance de la mano de corporaciones. Entonces si una cooperativa no tiene un plan de trabajo muy osado, buenos contactos e iniciativas, prácticamente va al fracaso. Es algo que se va a ir rehaciendo o reinventado, a medida que se vayan dando  formas de sortear las vicisitudes que plantea esta nueva etapa de la historia comunicacional en Argentina. Nosotros estamos en eso, luchando y remando.   Eso es a nivel infraestructura pero hay un tema que tiene que ver con el resignificado de la Comunicación ¿Qué tendrían que hacer este tipo de radios: comunitarias o cooperativas para comunicar a la gente de que se trata todo este nuevo proceso? Yo creo que es una inflexión en la historia de la comunicación en la Argentina, en el campo de batallas de las ideas, de lo cultural. Es una inflexión en la batalla por democratizar la comunicación y el principal desafío está puesto en la parte de aprender a informar democráticamente, manejando las fuentes de una manera, muy precisa, apelando al ADN de la información  porque la información es la historia que se condensa en un hecho o una noticia y cuando uno investiga hace el abordaje con pasión. Ese ADN histórico se empieza a comprender todos los procesos que  determinaron que un hecho sea noticia y tenga un interés. Entonces, hacer ese recorrido, tomar esa comprensión te fortalece mucho a la hora de formar las mentes, formar con equilibrio. Creo que ahí todos los medios que hoy están con la posibilidad de expresarse, tienen que mucho y hacer capacitaciones en esto de la producción periodística. Porque hay otro escenario, otra sociedad, porque tenemos que comprender que estas tecnologías también han modificado formas de narración, formas de instruir la formación de la noticia. Lo digo pensando en una cantidad de cosas, por ejemplo, el tema de las fuentes que tiene el abordaje un productor periodístico en muchísimos casos, en muchos medios que quieren competir incluso críticamente con la hegemonía de las grandes empresas se proveen del material de las empresas, de la lógica con la cual los empresarios construyen un criterio de legitimidad o ilegitimidad a partir del abordaje informativo hay que replantearse  cómo somos capaces de hacer un abordaje de las fuentes, no es un problema de la agenda.   En una nota contabas sobre la importancia de generar agenda propia ¿Cómo se lograría? Tenemos que comprender que hay un  movimiento sísmico a partir de la llega de Néstor Kirchner al gobierno y lo continúa Cristina, inicia un proceso de cambio de lógica de una manera de administrar políticamente el Estado. Ahí es donde aparece –entre otras cosas- esta necesidad de salvar la asignatura pendiente quitando la ley de la dictadura de Estado. Introducir este debate a lo largo del país, adecuándonos a las nuevas comprensiones que nos imponen las nuevas tecnologías en el mundo, los cambios de categorías en términos económicos, socioculturales, geopolíticos y tecnológicos que en la época de Héctor Larrea, la radio hacía pivote en su personalidad, en su concepto de traslado del relato el ritmo y de acompañar. Hoy la radio está anclada con todo el universo tecnológico y modificó muchísimo los relatos y los tiempos de comunicación, en la inmediatez porque por ahí hay alguien trabajando en su casa en internet y escuchando, por lo tanto ya deja de ser ese relato en el que te escuchaba atentamente. Todo esto debe ser sopesado, hay que trabajar para encontrar relato con una reelaboración de los sentidos en la radio, en su campo de imaginario porque la palabra es la tinta sobre la cual se escribe la letra. Y me detengo otra vez en las fuentes, hay decenas y centenas de grupos sociales que brindan información como podría brindar una agencia de noticias. Se han abierto otros canales mediante los cuales uno puede informar, adaptándola a su estilo, hoy hay un universo muy  nuevo trabajar, hacer un proceso de readecuación, muy autocritico porque también está la paradoja que están en el nuevo escenario de medios que reproducen lo que ellos critican en la forma de informar. Es un desafío que va a ser un largo proceso yo creo que el resultado tangible de la ley de medios, en términos sociales y políticos se verá en quince años. Esto abrió algo muy importante: que empiecen a haber otras voces. Vuelvo al tema de la tecnología. Hoy entras a internet pones BBC, El País de España, diarios de todo signo,  al mismo tiempo la globalización nos da una perspectiva, si está bien utilizado ese mecanismo de búsqueda podes obtener una mirada propia, cotejar la información, si a los hechos que convirtieron  un acontecimiento en algo enorme. Por ejemplo si cae un avión y está en el mar desaparecido toda la tecnología que espía a la humanidad ha sido incapaz de saber en dónde está, ese avión tiene a su vez elementos de máxima tecnología para poder ser detectado. Entonces en las narrativas se apelaban a casos parecidos, después, empezamos a darnos cuenta que el avión se extravió en el lugar más extraño del mundo, de pronto nos damos cuenta que el Triángulo de las Bermudas dejó de ser el lugar más extraño. Si uno  empieza a buscar información, a hacerse preguntas, el pensamiento crítico empieza a descubrir otros interrogantes ¿Es en verdad eso que pasó o es que alguien no quiso que se supiera dónde, cómo y por qué se cayó? Hay un montón de cuestiones que hoy se pueden hablar con los futuros comunicadores y con los veteranos.   ¿El pensamiento crítico cómo se transmite a los nuevos comunicadores? Estudiar es la defensa más importante para cualquier individuo, sobre todo para aquel que quiera ser comunicador. Hacer comunicación, periodismo, implica un esfuerzo y sacrificio de estudio, de investigación, de abordar conocimientos, de cotejar ese conocimiento, cruzarlo,  de encontrar un punto de equilibrio entre una versión y otra. Lo que más se aproxime a lo más comprobable en el mundo que vivimos, que nos alerta que hay un mundo geopolítico, hoy más que nunca impone la calidad del estudio, la capacidad de saber. Por ejemplo, con el Wikeleaks te estas enterando de operaciones destituyentes sobre gobiernos democráticos y espionajes de estado que pasaron veinte años atrás; quiere decir, que es muy extraño que un avión perdido tenga tan confusa información con la última tecnología. Uno está obligado, no a tener la verdad –porque  no existe- existe la construcción de los acontecimientos que nos permiten comprender el desarrollo de los procesos que tiene un punto de implosión que termina generando una noticia que es lo que hace al interés público. Que boca juega mal, que Bianchi ganó todo y ahora nada. Si hay veinte mil variantes de la información, que estén todas las variantes expuestas a la hora del análisis: el negocio de compra y venta de jugadores, cómo es la regulación, qué puede fracturar al equipo donde unos quieren lucirse más y a otros no los dejan. Dónde está la información que nos falta para poder entender.   ¿Ves más allá, tenes el ojo periodístico pero no te parece que hoy la sociedad también busca esas respuestas, se volvió más crítica? Creo que esta sociedad hace rato dejó de buscar respuestas. Es una sociedad que tiene un alto nivel de exigencia, lo cual está bárbaro pero es con un aplanamiento del pensamiento crítico, con una incapacidad de cotejar valores a favor de unos o de otros, y eso se debe a una información hegemónica que se ha construido, desde mi abuelo, mi padre, yo y mi hijo, o sea que son cuatro generaciones que están atravesadas por una sola forma de comunicar, de narrar y que empieza a generar el grave conflicto que ha puesto en marcha la ley de medios. No toda la sociedad logra comprender por qué es esta puja. Ahora acusan al gobierno de autoritario, mientras que durante todo el tiempo que duró su liderazgo, gracias a una ley del terrorismo de Estado, no tuvieron problema de criticar nada. Cuando se le afecta la capacidad de competir, donde puede aparecer otro a competir, ahí ponen el grito en el cielo. Porque en realidad no se preocupan por perder el negocio -que no lo van a perder- sino lo que les preocupa es el control del pensamiento, a través de lo que significa la información y la producción de los sentidos de la sociedad. Algunos dicen el gobierno no controla los precios, el gobierno tiene una cantidad de  falencias algunas muy visualizadas como actitudes muy loables, hace y lucha contra poderosísimos grupos de poder. A la gente no se lo cuenta, lo puede contar un Ministro, en el canal público pero se entera menos del 15% de la ciudad. Hacen un acuerdo con la industria lechera entonces los tres grande grupos desde el tambo a la góndola fijan el precio y lo firman, a la semana sacan otra marca con publicidad,  que vale casi el doble, cuando van a la góndola llevan un camión de la leche del acuerdo y otros de la nueva. Se acaba la del acuerdo y no les queda otra que pagar otra que sale el triple. Así se manejan los grupos económicos que regulan el  mercado. Entonces la puteada es para el gobierno, cuando el gobierno es incapaz de poder quebrar esa pulseada porque el poder económico y el del Estado es otra cosa. Como esta sociedad es una sociedad que se construyó con carencia de pensamiento crítico, te corren desde distintos lugares: Este es un gobierno autoritario, La jefa de estado está loca. Vino un tipo que vendió al país y era simpático y parece que todo eso era lindo, de golpe Menem era rubio y de ojos azules, cuando les sirvió a quienes tenían el poder de la sociedad. Lo que viene un poco a cuestionar la ley de medios, sumado a un ejercicio de lo periodístico muy precario, se ha perdido la calidad de construir pensamiento crítico e inteligente, de leer, estudiar, cotejar. Imagínate la desventaja que puede haber entre los espacios que quieren salir a competir, crear y que encima no tienen todos los elementos a su favor; sin embargo yo tengo una enorme expectativa en ese proceso. Creo que tenemos un escenario maravilloso de inclusión de pensamiento.         Más sobre Omar

  Estudió periodismo en la Escuela Argentina de Periodismo y en el Círculo de Periodistas de Prensa. Pasó por Radio del Pueblo, Radio Belgrano, por el periodismo gráfico, la prensa militante. Trabajó en Radio del Plata, Radio Ciudad de Buenos Aires, Radio Splendid (en un ciclo con Aliverti Prófugos). También tiene un libro El cazador de sueños. Hizo Mate Amargo con Alfredo Zaiat, Raúl de la Torre, Osvaldo Bayer (el padrino de Mate Amargo). Hoy están acondicionando el espacio para comenzar a transmitir por internet el programa de radio y  un canal de TV.