La presidenta Cristina Fernández arribó hoy a Venezuela procedente de Perú, tras la reunión extraordinaria de Jefas y Jefes de Estado de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que brindó esta madrugada un contundente respaldo a Maduro, y al proceso electoral del pasado 14 de abril.

A través de un acta de consenso, los presidentes de la Unasur instaron en Lima a «reconocer los resultados», condenaron «los hechos de violencia» y bregaron por «el diálogo y la tolerancia».

Los presidentes confeccionaron un acta de cinco puntos, en el que en principio transmitieron su «felicitación al pueblo venezolano por la elección del 14 de abril, y a Nicolás Maduro» por su triunfo. Enseguida, en el punto 2, instaron «a respetar y reconocer los resultados emanados por el Consejo Nacional Electoral (CNE)», y en el siguiente reafirmaron que «los reclamos deben realizarse dentro del ordenamiento jurídico correspondiente», al tiempo que destacaron haber «tomando nota positiva de la decisión del CNE de implementar una metodología que permita la auditoria» de las mesas electorales. 

Por otra parte, en el punto 4 del acta, los presidentes llamaron a «deponer toda actitud y acto de violencia que ponga en riesgo la paz social del país», y expresaron su «solidaridad con las familias de las víctimas fatales del 15 de abril», además de «invocar al diálogo y a preservar el clima de tolerancia» en Venezuela. 

En el quinto y último punto, los presidentes de la Unasur acordaron «la designación de una Comisión para acompañar la investigación de los hechos violentos del 15 de abril», que provocaron ocho muertos y más de 60 heridos en el país.

La reunión extraordinaria de los presidentes de la región sudamericana se convocó luego de que la oposición venezolana, encabezada por Henrique Capriles, y el gobierno de Estados Unidos, pusieran en duda el triunfo de Maduro, al punto de pedir un recuento de votos.