Sociedad

El Ejecutivo declaró a 2011 como «Año del trabajo decente, la salud y seguridad de los trabajadores»

El Poder Ejecutivo declaró al 2011 "Año del Trabajo Decente, la Salud y Seguridad de los Trabajadores", a través de un decreto firmado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, publicado hoy en el Boletín Oficial.

En el segundo de sus seis artículos, el decreto dice que «se dispone que durante el 2011, toda la papelería oficial a utilizar en la Administración Pública nacional, centralizada y descentralizada (…), deberá llevar en el margen superior derecho, un sello con la Leyenda `2011 – Año del Trabajo Decente, la Salud y Seguridad de los Trabajadores`».Además, establece que el Poder Ejecutivo «auspiciará las actividades, jornadas, seminarios, conferencias, y programas educativos que contribuyan a la difusión en el país del concepto de trabajo decente y de la prevención de los riesgos del trabajo, pilares sobre los que se asienta la Salud y Seguridad de los trabajadores».Mediante el decreto «se instruye a las dependencias de la Administración Pública Nacional con competencia en la materia, y especialmente al Ministerio de Trabajo para que a través de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, procedan a priorizar la promoción de las actividades en el cumplimiento de sus objetivos para el Año 2011″.Por último, invita «a los gobiernos provinciales y al de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir al Decreto».Entre los considerandos del decreto se expresa que «a nivel mundial y a través del Programa de Trabajo Decente auspiciado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) se ha instaurado el concepto de “trabajo decente”».»Este fue formulado por los mandantes del citado organismo —gobiernos y organizaciones de empleadores y trabajadores— como una manera de identificar las prioridades de dicha organización», continúa.Agrega que «tal concepto se basa en el reconocimiento de que el trabajo es fuente de dignidad personal, estabilidad familiar, paz en la comunidad, democracias que actúan en beneficio de todos y crecimiento económico, que aumenta las oportunidades de trabajo productivo y el desarrollo de las empresas».Dice además que «la OIT estima que el objetivo general del trabajo decente es provocar cambios positivos en la vida de las personas a nivel nacional y local, reflejando las prioridades de la agenda social, económica y política de los países y del sistema internacional».Luego señala que constituyen «objetivos prioritarios para el gobierno nacional dar solución a la problemática vinculada con la seguridad y la salud de los trabajadores y promover el trabajo decente entendido en el marco conceptual antes referido. Para el logro de tales cometidos, se considera necesario redoblar los esfuerzos normalmente requeridos para la efectivización de las políticas ya previstas en la normativa laboral vigente».