Productores ganaderos de Misiones denunciaron que una misteriosa afección ha provocado la muerte de cientos de vacas en las localidades de Las Tunas, Tres Capones, Capón Bonito, Apóstoles, Concepción de la Sierra y Azara.
Según relataron a la prensa local, los síntomas que presentan los animales son vientre prominente, tristeza, descenso de peso, apartamiento de la manada y muerte; en tanto que otros “se ponen rabiosos o se secan por dentro”. Este proceso puede ser fulminante o tardar meses, pero de acuerdo a las autopsias realizadas, el órgano que siempre es afectado es el hígado.
Este extraño suceso aqueja a los productores desde al menos un año y aún no se sabe cómo tratarlo.
Por tanto, en la jornada del lunes se reunieron representantes de productores e intendentes para analizar la situación.
El productor Juan Mantulak precisó a LT4 que en el encuentro acordaron la donación de animales enfermos para faenarlos y estudiarlos, en tanto que aseguró que para vender no se utiliza la carne de animales afectados. “Los ganados sanos cuando se van a faenar se llevan al matadero donde está Senasa para controlar, así que en eso hay tranquilidad”, remarcó.
Con respecto a las posibles causas, hasta el momento no hay respuestas ciertas sobre qué afecta a los animales aunque se especula con que pueda ser la planta María Mole, un medicamento en mal estado o una sobredosis.
En este sentido, el veterinario Vladimiro Steinmann, se inclinó por el crecimiento de malezas tóxicas para los animales debido a “un alto índice hídrico y muchos animales por hectárea, esto hace que el pasto decaiga”.
Sin embargo, Mantulak, que en un año perdió 25 vacas, duda de esta posibilidad: “María Mole siempre existió y no creemos que sea. Los colonos siempre trabajan de la misma manera con los medicamentos, así que no sabemos”, dijo y agregó “los veterinarios no lo pueden explicar”.
Los testimonios
“Hay productores que perdieron cuarenta, otros cincuenta, otros 17 vacunos. Las vacas se mueren a razón de tres por día en promedio. Ya fueron veterinarios pero nadie les dice qué pasa. Es ganado cuidado, de productores experimentados,
responsables, pero mueren como moscas, se secan por dentro, o se ponen rabiosos y van adelgazando”, cuentan los vecinos en el paraje las Tunas, en Concepción de la Sierra.
En diálogo con la prensa local, Cristina Olenik, una de las afectadas, se refirió al hecho como un misterio y además un drama, porque “cada vacuno cuesta muy caro. La mujer además agregó que suspendieron el consumo de carne vacuna porque no saben si lo que mata a las vacas es transmisible al humano.
