Con proyecciones, mesas de debate y foros, esta muestra apuesta a la creación de un circuito de exhibición permanente sobre materiales audiovisuales vinculados a los pueblos originarios y se realiza en consonancia con otras experiencias como el Festival de Cine de los Pueblos Indígenas en Chaco, que va por su cuarta edición, y el Primer Festival Nacional de Cine Indígena en la Patagonia, que finalizó días atrás en Neuquén.
El festival apunta también a confluir en el proceso de autorreconocimiento de las identidades indígenas de una diversidad de miembros de pueblos originarios que viven en la ciudad de Buenos Aires y el área metropolitana.
En este sentido, el festival propone tres foros: «El cine indígena como herramienta política y sociocultural»; «Experiencias de realizadores y actores en películas con temática indígena» y «¿Qué imágenes de los pueblos originarios llegan a la pantalla grande?»
La iniciativa cuenta con el aval del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), el Instituto de Cultura del Chaco, el Centro de Comuniación Mapuche KONA, el Centro de Formación y Realización Cinematográfica de Bolivia, el Serpaj, el Centro de Políticas Pública para el Socialismo y la Asociación Apatapelá.
