Opinión

El Frente Nacional Campesino marcha por «un nuevo modelo agrario acorde con el proyecto nacional»

Por Eduardo Duschatzky

El Frente Nacional Campesino (FNC) iniciará el 4 de abril próximo una marcha de casi tres meses «por un nuevo modelo agrario acorde con el proyecto nacional y popular liderado por Cristina Fernández de Kirchner».  «Vamos a comenzar la caminata nacional el 4 de abril desde el paraje Fortín Belgrano, punto de confluencia de las provincias de Formosa, Salta y Chaco, a orillas del río Bermejo, con la idea de llegar -80 días después- al Congreso Nacional, en Buenos Aires», confirmó a la agencia Télam el vocero del FNC, Benigno López. Medio centenar de referentes recorrerán alrededor de 1.700 kilómetros a través de Formosa, Chaco, Santa Fe y Buenos Aires, a una media de 20 kilómetros diarios, precisó López, presidente del Movimiento Campesino de Formosa (Mocafor), una de las bases del FNC, organización con arraigo en provincias del norte argentino. El dirigente agrario subrayó, además, la alegría de la organización con el proyecto de ley de propiedad de la tierra cuyo envío al Congreso anunció recientemente la Presidenta de la Nación.»Creemos que, en esta etapa histórica que vive la Argentina, persiste un modelo agrario que heredamos y no condice con el proyecto nacional y popular», dijo López. La intención de la marcha es «fomentar la discusión democrática, tanto dentro del campesinado y las comunidades originarias, como en los pueblitos del interior y también en las urbes, porque la gran masa de los argentinos está en las grandes ciudades», añadió. Sobre el modelo de matriz productiva cuestionada, dijo que se originó «en la época colonial, luego se readaptó con el modelo agroexportador de la oligarquía terrateniente y hoy con el agro-negocio sojero, dominado en gran parte por corporaciones multinacionales». «Es un modelo que acentúa la concentración de la tierra y creemos que hay que pasar a otro que garantice la soberanía alimentaria, la producción y el acceso a alimentos sanos para todos los argentinos, a precio justo», expresó. En especial, López criticó el monocultivo sojero por su efecto en la degradación del suelo, la concentración, los precios de la tierra, la salud por el abuso con los agrotóxicos, la destrucciópn de empleo y el desplazamiento de otras producciones, a la vez que señaló que aporta divisas por el alto precio internacional de esa leguminosa de exportación.»Nosotros tenemos una posición, tal vez se podría decir que moderada: no somos dogmáticos, de todo verde agro-ecológico, pero somos partidarios de regulaciones del Estado. No pueden imponer las reglas de juego los capitales del agro-negocio», subrayó. En ese sentido el dirigente campesino opinó que el Estado debe regular qué y dónde se produce, la industrialización y la comercialización, entre otros aspectos. «Todos tenemos derecho a producir y ganar, pero no es igual -por ejemplo- rentabilidad del ganado para un pequeño productor o para un estanciero», indicó López. Según explicó, «el campesino está subsistiendo todavía y hay que cambiar esta situación con regulaciones del Estado para evitar una concentración mayor y para democratizar el acceso a la tierra». El dirigente consideró «obscenas» las millones de hectáreas en manos de extranjeros, como los campos de Benetton en la Patagonia, «que lastiman los derechos de pueblos originarios y campesinos». «Y en estos casos, creemos que el Estado con las organizaciones tenemos que tener una posición clara de revisar esas situaciones, que, además, atentan contra la soberanía nacional», sostuvo, aunque valoró las inversiones en fábricas y frigoríficos «que transformen productos primarios de origen campesino».López afirmó, en particular, la necesidad de regularizar los títulos de propiedad de comunidades de pueblos originarios y de campesinos que ejercen la posesión «desde hace 130 ó 150 años» y que, en muchos casos, demandan formas de propiedad social. Además, señaló que campesinos con pequeñas propiedades no sustentables «tienen derecho a acceder a más tierras» y al respaldo de políticas públicas para el sector, a la vez que denunció que grandes superficies de tierras fiscales, en algunas provincias, «hoy se están transfiriendo a las corporaciones». «Creemos que con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que respetamos y que siempre va un paso más adelante que los movimientos, tenemos que llegar a acuerdos para regular todo esto», remarcó el dirigente del Frente Nacional Campesino.