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Homenaje a Solano López en Costanera Sur

En el Día de la Historieta y en un mediodía gris como los trazos de su lápiz, desde la Legislatura porteña homenajearon al dibujante del Eternauta en la Plazoleta Oesterheld. Allí fue recordado por familiares y figuras del mundo cultural.

Varias personalidades participaron del homenaje al dibujante del Eternauta.

Este mediodía se llevó a cabo el acto de homenaje a Francisco Solano López, dibujante del famoso texto de Héctor Oesterheld, autor de El Eternauta.

Fue en la plazoleta que lleva el nombre del dibujante desaparecido, en Costanera Sur, donde se inauguró una placa que recuerda a Solano López a poco más de un año de su muerte.

Además hoy se conmemora  el Día de la Historieta, ya que remite a la fecha en que se publicó el primer número de El Eternauta.

Al respecto, la legisladora porteña María Elena Naddeo, quien propuso la realización de la placa, manifestó que “hace quince años se bautizó la plazoleta con el nombre de Héctor Oesterheld cuando el Eternauta cumplía 40 años y hoy homenajeamos a su dibujante”.

“Esta historieta que narra la lucha de un grupo de porteños contra los malos que venían a invadir con violencia y constituyeron un grupo de resistencia que dio su vida para salvar a Buenos Aires y que fuera de nuevo independiente”, comentó y agregó que “es contradictorio que en un tiempo en el que avanza un proceso de castigo a los culpables de quienes se llevaron la vida de Héctor Oesterheld, la figura del Eternauta vuelve a causar una embestida represiva, la derecha le tiene miedo a ese mensaje liberador y por eso en la Ciudad de Buenos Aires quisieron prohibirlo”.

Asimismo recordó que Solano López hizo la cara del Eternauta con el rostro de Néstor Kirchner, y señaló que fue él “el presidente de los argentinos que derogó los indultos permitiendo que esos genocidas, asesinos de jóvenes, estén hoy juzgados y condenados”.

Por su parte el dibujante Miguel Rep, sostuvo que “es un momento alegre saber que hay un Día de la Historieta y que el tanque de eso sea el Eternauta y no otra historieta, porque representa y siempre tuvo calidad”.

“Ver cada cuadrito es meterse en un clima, eso es Solano, y muy pocos dibujantes lo han logrado, aunque fueran mucho más habilidosos que Solano”, marcó.

Asimismo añadió que “si al Eternauta lo hubiera dibujado otro no habría durado tanto, que bueno que Héctor lo decidió así, pese que aún Solano era muy joven, y  ojalá que sea una lectura invitante”.

Asimismo Juan Sasturain recordó las palabras que les escribió al dibujante al enterarse de su fallecimiento y sostuvo que “hablar del Eternauta es un lenguaje común, pero no tanto lo que le corresponde a Solano, el dibujante de lo real cotidiano”.

“Con un increíble efecto de realidad, lo que dibuja Solano, es simplemente cierto, es gente real”, señaló y aseguró que “nadie dibujó Buenos Aires, sus, calles y sus interiores como Solano”.

A su vez, el historietista Beto Lorenzo, quien realizó trabajos los últimos años con López, lo describió como un hombre “muy solidario y siempre se maravillaba por el reconocimiento de los últimos tiempos, ya que en Europa lo rechazaron por su dibujo sucio”.

Por su parte Elsa Sánchez de Oesterheld, viuda del autor, comentó que ella influyó mucho en la elección de Solano López como dibujante del Eternauta dado que su marido estaba muy indeciso.

“Yo se lo dije a Héctor, Solano era jovencitos y los que sabían decía que era muy inexperto, y yo le dije que Solano tiene alma”, recordó Elsa y comentó que con él pasó “recordando el éxito y olvidar un poquito lo que habíamos pasado, aunque eso no implicó que nos dejaran destruidos”. Finalmente Marina López, una de las hijas del dibujante, recordó a su padre y a su obra, agradeció el reconocimiento y calificó a Solano como “un hombre que sólo con la mirada lograba meterse a la gente en el bolsillo”.

También participaron referentes políticos y de la educación, como el legislador Aníbal Ibarra.

El Eternauta es un relato en forma de historieta  que convoca a la creación colectiva, a la solidaridad y a la lucha por la independencia y la autonomía de la Patria.

La placa se encuentra junto la de Oesterheld, en la plazoleta que lleva su nombre ubicada en Av. De los Italianos y Giralt, Costanera Sur.