El buque, que arribó el miércoles a Mar del Plata luego de haber estado retenido en Ghana por 77 días, podrá ser visitado en forma diaria hasta mediados de febrero, según informó la Armada Argentina. El corresponsal naval de la Armada, Oscar Filippi, informó que la Fragata podrá ser visitada todos los días en la Base Naval Mar del Plata, donde amarró ayer, en el horario de 17 a 20.

El buque escuela de la Armada Argentina, que cada verano es una de las atracciones para los turistas que visitan Mar del Plata, permanecerá en el puerto local hasta el próximo 15 de febrero, según adelantó el ministro de Defensa, Arturo Puricelli.

La Armada explicó que “desde hoy el buque podrá ser visitado por el público y medios de comunicación, diariamente de 17 a 20, horario que podrá ser extendido en ocasión de eventos especiales que se organicen en el predio de la Base Naval».

La Armada indicó además que “posteriormente la Fragata efectuará una navegación de adiestramiento para cadetes de los institutos de formación de la Armada, luego de la cual iniciará un período de mantenimiento y alistamiento para su próximo viaje de instrucción”.

Filippi señaló que el capitán de la Fragata, Pablo Salonio, y los 143 oficiales y suboficiales de la Armada que arribaron desde Ghana, “van a recibir al público que se acerque a visitarla”.

El corresponsal naval contó que «después del histórico recibimiento que tuvo ayer la Fragata, ahora hay que alistarla ya que viene de Ghana, de un viaje largo, sin escalas de ningún tipo”.

La Fragata Libertad, construida en el Astillero Río Santiago, es un buque escuela que tiene como misión completar la formación profesional de los guardiamarinas recientemente egresados, que se incorporan a la oficialidad de la Armada Argentina.

Asimismo, contribuye a la política exterior representando a la República Argentina en los puertos del mundo en los que recala.

En ese sentido, Salonio contó que “hay sólo nueve veleros con más de 10 metros de eslora y de ellos cuatro son del mismo país que su tripulación”, y refirió que la Fragata Libertad “permite al tripulante una cercanía con el mar y una gran experiencia marítima, ya que es la misión de los guardiamarinas”.

La Fragata Libertad fue botada por primera vez el 30 de mayo de 1956, y entre los trofeos obtenidos se cuentan la «Gran Medalla» por una travesía totalmente a vela en 1966, cuando obtuvo el récord mundial para Grandes Veleros en el cruce del Atlántico Norte, entre Cabo Race (Canadá) y la línea imaginaria Dublin-Liverpool, recorriendo más de dos mil millas en ocho días y medio.