Opinión

Por Patricia Vaca Narvaja*

Ley de Medicina Prepaga: «Regulación de conductas corporativas, protección de los consumidores»

Efectivamente, el bloque del Frente para la Victoria del Senado, entiende que el proyecto de ley que regula las empresas de medicina prepaga atenta contra la continuidad de los abusos para los usuarios desde hace más de 50 años.

Es un proyecto que fue aprobado por unanimidad en la Cámara de Diputados, en el año 2008. No es cierto que vayan a quebrar o desaparecer las empresas de medicina de prepaga. Sucede que de ahora en más, una vez sancionado, dejarán de existir aquellas empresas fantasmas que aparecían, recaudaban cuotas y luego se esfumaban dejando sin cobertura a sus asociados.

Asimismo, frente a la quiebra o cierre de empresas, los usuarios ya no estarán desprotegidos, habrá un fondo de garantía, (reserva técnica) para continuar los servicios, mientras la autoridad de aplicación (la Superintendencia de Servicios de Salud) redistribuye en el sistema a los afiliados afectados.

Dicha reserva técnica será sólo el equivalente al 50% de la facturación de un año.

El proyecto de ley solo regula a las obras sociales en tanto éstas brinden cobertura a usuarios ajenos a sus trabajadores y familias, con la metodología que hoy utilizan las prepagas.

De ninguna manera puede desconocerse la aplicación de la ley 24240, de defensa del consumidor, para lo atinente a las relaciones de consumo: cumplimiento contratos, publicidad, cláusulas abusivas etc. Otros servicios como las tarjetas de crédito, seguros, etc., tienen sus propias leyes pero se complementan con la de Defensa del Consumidor.

La ley establece con absoluta claridad las incumbencias de la Superintendencia de Servicios de Salud para todos los aspectos y requisitos técnicos, económicos, y prestacionales del sistema de medicina prepago.

Respecto de las cooperativas, se protege a las que efectivamente lo son y no a aquellas que usufructúan esa modalidad para ocultar su verdadero accionar como empresas de medicina prepaga.

Por supuesto que toda ley es perfectible, pero también lo mejor es enemigo de lo bueno, y hasta hoy los usuarios han sido los más perjudicados por esta anomia.

Las empresas de medicina prepaga podrían seguir trabajando el próximo año, para mejorar la normativa, con el mismo empeño que tuvieron para evitarla todos estos años. Tan mal no les fue.

*(La autora es Diputada Nacional MC, y embajadora argentina en México).