A continuación la convocatoria de «Los Tambores no callan»:

“Estoy seguro de que compartimos la perplejidad y la angustia por los linchamientos de pibes.

No sé cuántos casos van ya… pero después de darle manija y manija desde los medios hay gente que decidió tomar cartas en el asunto… decidió ponerle el cuerpo a lo que entiende por «inseguridad» y encontrándose en la posibilidad, descargó en horda toda su furia sobre la cabeza de un pibe reducido… golpe sobre golpe… hasta matarlo.

A pocos días del 24 de marzo donde, masivamente, repudiamos la dictadura fascista en nuestro país, el cascarón de un fascismo silvestre, solapado, cotidiano, pero no menos terrible, se abre desde dentro de cierto «sentido común» y muestra su cara feroz y desencajada; el rostro de eso que (quizá) pensamos extirpado, exorcizado, pero que ahí está… golpe sobre golpe… en la cabeza de un pibe…

Se viene diciendo mucho al respecto… horas de tele, páginas de diarios, declaraciones, documentos… blablabla… se habla y se habla del tema. Hay mucha palabra pero ningún cuerpo en la calle.

Desde Los Tambores No Callan queremos poner el cuerpo. No podemos callarnos.

No podemos naturalizar esto que pasa. No podemos «comprender» como dice el sorete de Massa, ni chamuyar sobre «inclusión» como ciertos funcionarios nacionales, cuando conocen de sobra el maridaje entre las bandas del narcotráfico, las policías, y la política miserable que habitan; o cuando miran para otro lado frente a la realidad de que ahora mismo hay pibes para los que su propia vida no vale nada, que nacen sin otro horizonte que el del día en que (todavía) están vivos… irónica parábola budista zen…

No podemos callarnos.

Este viernes 11 de abril desde las 18 nos vamos a juntar en 9 de Julio y Avenida de Mayo, en la plazoleta del Quijote (o de los Qom!) para vernos las caras y abrazarnos, para encender fuego y templar tambores, para hacer stenciles y pintarnos los ropajes con este grito.

Porque no podemos callarnos.

Y lxs vamos a esperar a cada uno de ustedes (a vos! a vos!). Vamos a invitar a todxs lxs que fuimos encontrando en este camino de tocar candombe afrouruguayo en apoyo a causas políticas y sociales populares, y a todxs los que sientan que hay que hacer algo.

Vamos a poner nuestros cuerpos en la calle y vamos a decir con ellos. Vamos a colgarnos los tambores y a sonar con fuerza. Proponemos toque y danza hasta la Plaza de Mayo, en el mismo recorrido que hicimos apenas hace apenas días, el 24 de marzo, porque esto es el fascismo, y porque dijimos mil veces Nunca Más.

Ojalá entre todxs podamos ayudar a instalar una pregunta… de esas que suelen hacerse en soledad y frente al espejo.”