Ciudad

Máquinas del Metrobus rompieron un caño de agua

Un caño maestro de agua fue roto por máquinas que operan en obras del Metrobus, e inundó parte de la avenida 9 de Julio, el domingo por la tarde, personal especializado trabajó para repararlo, para evitar problemas en el suministro de agua.

Operarios de Agua y Saneamientos Argentinos (AYSA) trabajaron en la avenida Corrientes, luego de los inconvenientes de tránsito causados por el desborde que causó la rotura del caño, ocurrida aproximadamente a las 3

 

Una fuente de AYSA dijo que el tránsito «está normalizado y no hay problemas con el suministro de agua», a lo que agregó que el personal de esta empresa «prevé concluir las reparaciones en el transcurso de la tarde»(del domingo).

 

«La prestación del servicio de agua en la zona es normal, ya que al tratarse de edificios, todos cuentan con reservas», precisó y agregó que por ser domingo «la afectación al tránsito es mínima».

 

Respecto del subterráneo, hubo filtraciones de agua en la estación Carlos Pellegrini de la línea B, pero el servicio no se vio afectado y todas las formaciones se detenían en esa parada.

 

El ducto de AYSA en cuestión, de 25 centímetros, fue alcanzado accidentalmente por una de retroexcavadora que trabajaba en la construcción del Metrobus, lo que causó la salida de agua y la formación de una laguna en el cruce de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, junto al Obelisco.

 

Pese a que el agua salió con fuerza durante varias horas, el suministro no fue interrumpido en la zona y los operarios de AYSA trabajaron para la reparación del caño, para lo cual fue necesario reducir la presión del líquido.

 

Cerca del mediodía, la empresa emitió un comunicado, en el que consideró que la maniobra de la retroexcavadora que causó el accidente fue un “mala acción”.

 

“Producto de dicha mala acción, hubo una baja en las presiones normales del servicio de agua en la zona aledaña al Obelisco, aunque los usuarios residenciales, teniendo en cuenta que las instalaciones internas de los edificios contemplan la existencia de tanques de reserva,  no lo  notarlo”, añade.

 

El 4 de marzo pasado, por obras del Metrobus hubo un escape de gas en la esquina de 9 de Julio y Alsina, cuando, por un error humano, una máquina averió un caño de Metrogas.

 

En esa oportunidad, varias cuadrillas de la empresa concesionaria tuvieron que trabajar toda la noche para controlar la fuga, que pudo ser subsanada al día siguiente.