Varios hombres armados se infiltraron en el edificio adyacente y se enfrentaron con las fuerzas de seguridad, relató un portavoz de la policía, quien agregó que se escuchó una explosión y varios disparos. Decenas de empleados y otras personas que estaban dentro del recinto de la Comisión Electoral Independiente (IEC por sus siglas en inglés), se refugiaron en el sótano, la policía de Kabul informó que los cinco talibanes murieron en el ataque, mientras que entre quienes se encontraban en el lugar no se registraron víctimas. Tras el ataque los talibanes se responsabilizaron del bombardeo, precisando que fue un «atentado suicida». El portavoz de los talibanes Zabihula Muyahid explicó, citado por la agencia DPA, que se activó un coche bomba en la entrada del edificio antes de que los hombres armados lo asaltaran. Los talibanes incrementaron sus ataques contra extranjeros en la capital afgana, lo que sugiere que están cambiando las tácticas para centrarse en objetivos civiles que no están tan fuertemente protegidos como instalaciones militares y gubernamentales. Cuando comenzó el ataque, el diputado de la comisión de seguimiento de los medios de la IEC Ashmat Radfar, que estaba en el edificio, huyó al sótano con otras 40 personas. Cerca de 15 granadas propulsadas por cohetes cayeron en la zona donde varios depósitos se vieron afectados, le dijo Radfar a los periodistas después de que él se las arregló para salir del recinto. Los depósitos contenían boletas y otros materiales electorales importantes. Los talibanes señalaron como objetivo a este organismo por ser responsable del recuento y verificación de las próximas elecciones presidenciales y considerarlo una extensión del Gobierno de Kabul, al que juraron eliminar para reinstaurar su antiguo régimen en el país centroasiático. Fue este un mes de en el que la violencia se dirigió a los extranjeros, ayer fue atacado un hospedaje perteneciente a una ONG estadounidense, perdiendo la vida 6 personas y al menos otras, entre ellos cinco atacantes, murieron el martes en la ciudad en otro ataque talibán contra la sede central del comité de campaña de uno candidato a legislador por la provincia de Kabul. A mediados de este mes, el periodista sueco Nils Horner fue asesinado a tiros en Kabul por presuntos talibanes. El 21 de marzo, 13 personas murieron, entre ellas dos niños, cuatro mujeres y varios extranjeros, en un ataque contra el Hotel Serena de Kabul, uno de los más protegidos de la capital afgana y frecuentado por ciudadanos de otros países. A mediados de enero, 21 personas, entre ellas 13 extranjeros, murieron en un atentado contra un restaurante frecuentado por occidentales en el centro de Kabul, en uno de los ataques con el mayor número de víctimas de otros países. Esta nueva ola de violencia provocó el temor de que se repita el derramamiento de sangre que empañó las elecciones de 2004 y 2009, cuando los talibanes demostraron su oposición a las urnas a través de la violencia. Los afganos elegirán este 5 de abril al sucesor del presidente Hamid Karzai quien -según la Constitución- no puede acceder a un tercer mandato. Karzai estuvo al frente del país desde la caída del régimen talibán a fines de 2001.
Fuente: Telam
