David Moreira de 18 años, falleció anoche luego de que el sábado a la tarde, vecinos del barrio Azcuénaga de Rosario, lo lincharan salvajemente acusándolo de haber robado una cartera a una chica.

Según informó Infojus, unas 50 personas fueron las que protagonizaron este hecho en la zona oeste de la ciudad rosarina.

Todo comenzó hacia las 17 horas, cuando una chica de 21 años que caminaba por Pasaje Marcos Paz al 900 con su hija de dos, fue abordada por dos personas en moto, quienes le arrebataron un bolso con pañales y escaparon. Minutos después, una camioneta los interceptó: uno de ellos logró huir y el otro quedó a merced de la furia de los vecinos. 

Fue entonces cuando se congregaron los vecinos alrededor de Moreira y lo golpearon con saña hasta que el joven quedó tendido inconsciente sobre el asfalto.

“Felicito a cada uno de mis vecinos, orgullosa de mi barrio, la próxima les cortamos las manos en la plaza delante de todos, como en la época medieval”, escribió una mujer del barrio que celebró el linchamiento, en la cuenta de Facebook creada por los vecinos para reclamar por los robos en la zona.

“El chorro estuvo tirado de las 17 hasta más o menos las 19.30”, detalló una mujer y agregó que “solo una vecina desubicada llamó a la ambulancia”. Según su relato, otra persona volvió a llamar para decir que se trataba de una “falsa alarma”.

El joven fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez con graves traumatismos y pérdida de masa encefálica, donde permaneció internado hasta ayer, que falleció.

“Mi hijo no era un delincuente”

David era el mayor de tres hermanos y trabajaba como peón de albañil. Su muerte causó la indignación de familiares y amigos, quienes piden justicia y aseguran que no tenía antecedentes penales.

“Mi hijo no era un delincuente, se levantaba a las seis de la mañana y se iba a trabajar todos los días. Volvía a las cinco de la tarde”, reclamó Lorena, su madre, durante el entierro en el cementerio La Piedad.

De la misma forma, se manifestó su papá, Alberto, quien sostuvo que “esto no tiene que quedar impune”.

La investigación

El fiscal Florentino Malaponte de la Unidad de Homicidios Dolosos, a cargo de la causa, convocó a varios testigos y tomó declaración a los primeros policías que llegaron al lugar y a los padres de la víctima. Pero aclaró que “necesitamos pruebas que no encontramos”.

De esta manera, la causa judicial solo cuenta con el testimonio policial. Los vecinos, que en las redes sociales celebraron el linchamiento, por ahora callan.

Por su parte, el juez de la Cámara Penal, Ernesto Pangia, indicó que el hecho “es un extremo, no hay antecedentes de una reacción que haya provocado la muerte, pero es muy común hoy día que la gente reaccione ante un delito o una injusticia»

En declaraciones a la radio LT3, aclaró “no con esta vehemencia, pero palizas se están dando muy seguidas, eso lo advertimos. Es la reacción de la gente que ante la impotencia responde de esta manera».