El senador Juan Carlos Romero se alistó para las elecciones de 2015 presentándose como “candidato a gobernador por Salta”ante sus seguidores y los medios de prensa provinciales.

La noticia causa sorpresa en el arco político local ya que el ex mandatario salteño se encuentra complicado judicialmente a raíz de una causa que lo investiga por haber realizado un entramado societario y operaciones irregulares -mientras estaba al mando de la provincia- con el único objetivo de apropiarse de diversos estancias donde debían construirse viviendas sociales.

Pese a estas acusaciones, el senador Romero se reunió con sus equipos técnicos en el lanzamiento de las mesas sectoriales en Fundara y anunció que sumará a integrantes de otras fuerzas para “generar un equipo nuevo que logre el cambio necesario”.

En un parte de prensa, aseguró que propondrá un plan estratégico para el desarrollo del interior provincial y afirmó que “trabajaremos con fuerza para que Salta vuelva a su esplendor”. 

“Tenemos un proyecto para sacar a Salta adelante porque la provincia está dejada. Queremos trabajar cuatro años más para dejar una provincia mejor”, dijo el mandatario y aclaró que “si creemos que todo lo que hicimos (en sus anteriores administraciones) está bien, nos equivocamos. Salta necesita este cambio, con una sociedad que participe activamente”.

Entre tanto, se prevé que en las próximas semanas Romero abra una ronda de encuentros con todos los intendentes de la provincia.

Causas

Una de las primeras investigaciones que involucra a Romero, es una acusación penal contra Juan Gilberto Oviedo, ex ministro de la Producción y hombre de plena confianza del ex gobernador.

Según las investigaciones judiciales, esta causa prueba el inusitado interés de Romero por quedarse con las tierras de La Ciénaga, terreno que se encuentra enclavado en un predio de más de 800 hectáreas que pertenecen a tres firmas de las cuales los Romeros son socios mayoritarios.

Se trata de Prados de Atocha S.A., empresa que compró las 90 hectáreas al gobierno de la Provincia con un sobreprecio más que sospechoso. A esta se suma luego Estancia El Carmen S.A., firma en la que los Romero tienen injerencia directa. Esta empresa se quedó con las tierras de La Ciénaga por una suma de 100 mil pesos, muchas veces inferior a los que el gobierno desembolsó por ellas. La tercera empresa en el ojo de la tormenta es Dinarco S.A., cuyo socio mayoritario es precisamente Oviedo. A través de estas tres firmas, Romero se quedó con más de 800 hectáreas sobre la cuales tiene previsto crear un lujoso proyecto urbanístico con chalets y country. Este, según la promoción penal, es el verdadero negocio del ex gobernador y su familia.

La causa que lo complica más a Romero es “La Ciénaga”, donde hay varios elementos que prueban que cómo esas tierras pasaron del estado provincial a manos de Prados de Atocha S.A. y luego a Estancia El Carmen S.A. vinculada directamente a los Romero, pues Juan Esteban Romero, hijo del ex gobernador, presidía dicha sociedad.

Citas judiciales

Romero fue citado a declarar que sigue firme en su decisión de darle la espalda a la justicia, hasta tanto se resuelvan las nulidades planteadas por su defensa.

Entre tanto, la fiscal penal 7, María Inés Loyola, solicitó la semana pasada que se cite a indagatoria a Juan Gilberto Oviedo, pieza clave en todo este andamiaje, sea citado a indagatoria.

Este paso, en parte, se debe también al propio ex gobernador, pues su defensor se quejó por el hecho de que solamente se había citado a su cliente y no al resto de los imputados.

Ahora, el juzgado debe decidir la fecha en que Oviedo debe presentarse a explicar las inversiones hechas por Dinarco S.A. en

La Ciénaga cuando todavía no se había hecho público que por ese lugar atravesaría la autopista.