En el programa «Mano a Mano» que emite el canal CN23, ratificó que «es falso que hayamos reprivatizado el sistema. Es falso que los que hoy operan la línea Belgrano Sur, Roca, Mitre y San Martín hayan tenido que ver con el proceso anterior, cuando precisamente vinieron a resolver las rescisiones de dos contratos». De todos modos, advirtió que «si no cumplen, no me va a temblar el pulso para echarlos: a Roggio, a Romero, de la misma forma que los separé del Sarmiento, como tampoco para enfrentarme con los dirigentes sindicales, que en realidad no acompañan el proceso. Nosotros no tenemos compromiso con nadie, salvo con los usuarios», subrayó. Respecto a la formación ferroviaria en la Argentina, señaló que tiene una antigüedad de medio siglo. «Por decisión política de la Presidenta estamos llevando a cabo un proceso de transformación y recambio de esas formaciones. El primer compromiso era con el Sarmiento, con la incorporación de 25 formaciones de 9 coches cada una, de las que ha llegado la primera y el resto se irá integrando paulatinamente de acá hacia junio, con lo cual no sólo se renovará la capacidad de transporte que hoy tiene el Sarmiento», explicó. Puso de relieve que «hemos logrado tres cuestiones fundamentales: la calidad, el precio de las formaciones y el tiempo de entrega, que tampoco tiene antecedentes, inclusive, para trenes que funcionan en China». Consultado sobre los escraches a empresas, aclaró que «no estoy de acuerdo con las protestas a cara tapada. Sí lo estoy con que los argentinos nos empoderemos en defensa de nuestro propio bolsillo y que un grupo de empresarios inescrupulosos no nos terminen robando. Y si no se los señala muchas veces es porque son los que ponen pauta en los medios y gozan de impunidad. Entonces siempre es más fácil echársela al gobierno». Y acerca de la paritarias, insistió en que el gobierno no les fijará un techo.»Cada actividad en particular debe llevar adelante un proceso de negociación entre empresarios y trabajadores, pero con racionalidad para cuidar todo lo que hemos logrado en estos últimos años y que por supuesto el trabajador no pierda poder adquisitivo. Pero protegiendo el empleo, que es un tema clave».     Opinó que lo peor que podría pasar es que hubiera conflictos sindicales, y que «por ejemplo no haya acuerdo en la paritaria docente y no haya clases, es el peor daño que le podemos hacer a los pibes». 

Fuente: Sala de Prensa