Una tortuga negra de un metro de largo fue hallada y salvada ayer cerca de la punta norte del golfo San Matías, a unas 45 o 60 millas de la ciudad rionegrina de San Antonio Oeste.

Se trata de una especie casi inusual en las costas argentinas, que fue atrapada por la red de arrastre del barco tangonero “Puente San Jorge” de la empresa de capitales chinos Altamare, dedicada a la pesca de langostinos.

Según precisaron a El Diario de Madryn, en plena labor el capitán, a poco más de quince minutos de arrastre, ordenó levantar las redes y en ese momento parte de la tripulación observó extraños movimientos en las redes.

Roberto Arce, uno de los integrantes de la dotación, se acercó y vio entre los langostinos a en inmenso ejemplar de Chelonia agassizii, más conocida como tortuga prieta o negra, que se debatía con un cazón prendido de su cola.

Los marineros rápidamente se vistieron de rescatistas para liberar la especie, la cual se encontraba en un estado de estrés y casi inconsciencia. Tras liberar al animal, le echaron agua salada para que volviera en sí y, acto seguido, la devolvieron al océano en donde rápidamente salió nadando.

Tras la hazaña, los marineros se mostraron sorprendidos por el hallazgo de este animal: “en 23 años de pesca es la primera vez que veo algo así”, señaló Arce al matutino de Madryn.

Y es que la tortuga negra se concentra más en las costas del Pacífico, en general no migran y no les gusta alejarse de la costa.

Si bien se sabe que pueden alcanzar hasta los 126 kilos y son de un negro brillante, no se sabe exactamente cuántas tortugas negras hay y uno de sus mayores predadores es la pesca incidental por redes de arrastre. Por este motivo, en el Estado de Michoacán, México, son protegidas desde 1982.