Federal

Otra vez la interna de la UOCRA a los tiros

Un grupo disidente ocupó la sede del gremio, hubo disparos de armas de fuego, incendió una camioneta y provocó caos. Hay 10 detenidos.

Alrededor de las 4.30 de la madrugada un grupo de siete personas ingresaron armadas a la sede de la Unión Obrera de la Construcción delegación Comodoro Rivadavia.

Alrededor de las 4.30 de la madrugada un grupo de siete personas ingresaron armadas a la sede de la Unión Obrera de la Construcción delegación Comodoro Rivadavia.

Golpearon y tomaron como rehén a un sereno y recién desalojaron las instalaciones con la intervención de Fiscalía y la Policía de la Provincia del Chubut alrededor de las 10. Hubo cuatro detenidos, más de 10 personas demoradas por averiguación de antecedentes, secuestro de armas y un incendio provocado en una camioneta que sería propiedad del gremio de la construcción.

Se suma con esta forma un nuevo capítulo de violencia a esta interna gremial que se manifiesta a través de cruces y agresiones. Los vecinos de la cuadra debieron, nuevamente, sufrir horas de tensión en principio con las detonaciones que provenían desde el exterior de la sede y, luego, con el incesante despliegue de vehículos particulares que advertidos de la situación intentaban acercarse a contramano con la idea de “recuperar” el edificio.

Se hizo presente el ex secretario general Luis Gortari, quien atribuyó el ataque al “cansancio” de los afiliados que sufren constantes presiones e insistió en la intervención de la UOCRA central para determinar a las autoridades genuinas del gremio, luego de haber sido desplazado del cargo a través de una asamblea de trabajadores. “Esto era sabido; la decisión la tomaron los muchachos y fue repentina. Son gente que nos están acompañando, que los corren a tiros y están cansados de que la Justicia no haga nada”, explicó mientras se producían los acontecimientos en el gremio cuya conducción intenta recuperar.

Quienes ocupan actualmente la comisión directiva cuestionaron los métodos utilizados para reclamar, y plantearon que a diferencia de otras ciudades, el sector cuenta con una importante oferta laboral a partir de la reactivación de la obra pública y que no se trata de un planteo “por falta de trabajo”. Raúl “Conejo” Silva atribuyó el hecho a la gestión saliente. “Lamentablemente se repiten este tipo de hechos que manchan al gremio. Nadie quiere que estas cosas pasen. Hay un compañero herido, muy golpeado”, explicó.

Los alrededores de la UOCRA, situada en Rawson entre Saavedra y Alvear se convirtieron en un territorio de riesgo para los vecinos porque a la tensión se le sumó más tarde, el incendio intencional de una camioneta que sería propiedad del gremio. A casi una cuadra de la sede, autores no identificados y que no habrían intervenido en la toma, generaron el fuego que terminó provocando importantes daños materiales en el vehículo a pesar de la rápida intervención de la autobomba de Bomberos Voluntarios.

El segundo jefe de la Unidad Regional, comisario Héctor Quisle, dio detalles del procedimiento y confirmó, en principio, la detención de cuatro personas. “Se detuvo a un grupo de personas que portando armas de fuego habrían disparado hacia el interior de la sede sindical. Hubo cuatro detenidos y tres armas secuestradas. Se presume que estas personas, de otra facción del sindicato, la habrían emprendido contra el local”.

Entre los detenidos, que fueron trasladados a la Seccional Segunda, figura Rubén Crespo, procesado durante el ataque de la UOCRA al edificio municipal junto a otros de apellido Lepe, Silva y Baeza. Frente a la delegación gremial se encontraron vainas servidas y pudieron observarse impactos de bala sobre la mampostería, ventanas y vidrios. “Un sereno fue golpeado en el interior, tenía signos evidentes de haber sido golpeado y negociación mediante, se lo liberó por los techos lindantes para brindarle la atención médica del caso”, dijo Quisle en referencia a Cristian Lavin, que fue tomado como rehén y duramente golpeado. El Ministerio Público Fiscal autorizó la continuidad del procedimiento y, finalmente, los ocupantes decidieron retirarse del lugar requiriendo la intervención de Fiscalía e insistiendo en la necesidad de “blanquear” a las autoridades gremiales.