Política

«Voy a seguir en la Corte»

Tras las críticas, el ministro nonagenario de la Corte Suprema negó una renuncia a su banca en el máximo tribunal de Justicia y descartó que el Gobierno busque desplazarlo del cargo.

El juez Fayt defendió su trabajo.

El magistrado Fayt sostuvo: «Soy sencillamente un servidor de la República que tiene responsabilidades que cumplir». 

 

«Es importante cumplirlas con lealtad, patriotismo y un profundo deseo de que las cosas marchen mejor; de que los ciudadanos vivan honradamente como deben vivir», marcó el juez.

 

Las escuetas declaraciones de Fayt llegan poco después que el secretario general de la Presidencia ,Aníbal Fernández, le enviara una carta al presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, con el objetivo de solicitar que la Comisión de Juicio Político de esa Cámara evalúe la capacidad psicofísica del miembro de la Corte.

 

En la misiva publicada en el blog del senador Fernández bajo el título ‘Dr. Fayt…¿Sique siendo idóneo?’, el funcionario nacional justifica su requerimiento a fin de verificar que «el magistrado no se encuentre inmerso en la causal de mal desempeño de sus funciones en los términos del citado artículo 53 de la Constitución Nacional, producida por la posible disminución de su capacidad en virtud de su avanzada edad».

 

En el texto, Fernández cita que el artículo 99 inciso 4° párrafo tercero de la Constitución Nacional ordena «la necesidad de un nuevo nombramiento» para mantener en el cargo a los magistrados, una vez que cumplan la edad de 75 años. 

 

«Todos los nombramientos de magistrados cuya edad sea la indicada o mayor se hará por cinco años, y podrán ser repetidos indefinidamente, por el mismo trámite», recordó. 

 

Sobre la edad del juez, Fernández reiteró: «Fayt posee noventa y seis años, superando ampliamente el límite constitucional fijado en el artículo precedente, tornándose imperativo la intervención de la Comisión de Juicio Político».

 

Sin entrar en polémicas con el secretario, Fayt reivindicó el rol de la prensa y pidió «que los periodistas sean auténticos periodistas para servir al país» y que le adviertan a la sociedad sobre «lo bueno y lo malo, para corregirlo».

 

Fayt evitó opinar sobre la muerte del fiscal especial de la AMIA Alberto Nisman y se excusó en dar declaraciones que pueden entorpecer la pesquisa. «La gente pide justicia, y justicia con altura, con dignidad, con respeto a los derechos humanos. Creo que el país merece que se le respete, y yo respeto al pueblo», indicó.