El Gobierno de Santa Cruz declaró a la Presidenta Huésped de Honor permanente en esta capital, por un decreto que le entregó el mandatario provincial, tras lo cual la mandataria se dirigió al país destacando las obras para esta capital, Río Turbio y Piedra Buena. Para esta capital, además de confirmar la asignación por parte de la Agencia de Administración de Bienes del Estado –AABE- del terreno para construir la planta de tratamiento integral de residuos sólidos urbanos, anunció la iniciación de la obra de las primeras cien cuadras de pavimento, con su sistema cloacal completo: “No son cien cuadras para que se vea pavimento, sino con todo lo que tiene que ir por abajo”, afirmó. Al anunciar las cuadras que serán pavimentadas en esta capital, Cristina dejó una tarea a los concejales, en defensa de la historia nacional y de los pueblos originarios, para que cambien en forma urgente el nombre de la calle Hernán Cortez, por tratarse de «un conquistador que mató mexicanos aborígenes, habiendo tantos argentinos, santacruceños y riogalleguenses ilustres que se lo merecen». Al hablar del acceso a Río Turbio donde se construye la Central Termoeléctrica, destacó la Ruta Nacional Nº 40, por más de $100 millones y recordó que Néstor Kirchner fue quien inició obras en el tramo más extenso de esa vía en la provincia de Santa Cruz, y dijo esperar poder completarla en toda su extensión del país, para 2015. Salud. Asimismo, tras anunciar una inversión de más de $110 millones entre obra civil y equipamiento, en el Hospital de Comandante Luis Piedra Buena, la Presidenta recordó que cuando Kirchner fue por tres veces gobernador dejó los 14 hospitales funcionando y dijo entender que en Santa Cruz, “teníamos el sistema público de salud más importante de la República Argentina”. “Queremos volver a reconstruir ese sistema de salud pública en la provincia de Santa Cruz”, dijo, al tiempo que recordó que como diputada provincial le tocó defender desde su banca, la decisión de construir el nuevo Hospital Regional Río Gallegos y reformar la cartera sanitaria: “Tuvimos una gran oposición de los sectores privados” y también de los diputados de la oposición dijo, “no es invento, hay versiones taquigráficas”. Para Cristina: “La salud pública debe fijar un piso mínimo de prestaciones, y de ahí para arriba que vengan los privados a competir, pero el Estado tiene la obligación de fijar el piso y lo mínimo que requiere la ciudadanía, para recibir como salud pública”. En el caso de Piedra Buena, Puerto Santa Cruz y El Calafate, dijo que esos hospitales “tienen una importancia estructural” por la obra de las represas sobre el río Santa Cruz, próxima a iniciarse y, que aseguró: “van a cambiar la historia de nuestra provincia». Club de París. Un extenso párrafo dedicó la Presidenta para “compartir la alegría” por el acuerdo alcanzado esta semana con el Club de París y referirse al ministro de Economía, Axel Kicillof: “Muchos habían cuestionado la juventud del ministro”, dijo, lo que consideró “un eufemismo para decir que lo que les molesta es la convicción, las ideas con las que se defiende al pueblo y los intereses de la patria”, sostuvo. También contó que mientras esperaba el resultado de la negociación en la quinta de Olivos, “leía una crónica que decía que habíamos ganado por cansancio. Le decía a Axel el otro día, que tuvo que aguantar desde las 10 de la mañana, realmente con la misma convicción con las que ustedes van a los actos”, afirmó. Además, Cristina Kirchner recordó que “cuando se comenzó a tomar la deuda del Club de París” ella tenía tres años y Axel Kicillof “no había nacido”. “Entonces, que nos vengan a criticar los que la concibieron, parece una broma”, deslizó. Para finalizar, se refirió al conflicto que llevan adelante autopartistas, que paralizan la actividad de cinco automotrices, con la toma de una planta en la provincia de Buenos Aires y tras fundamentar cuestiones de jurisdicción y destacar la actuación del secretario de Seguridad, Sergio Berni, ante conflictos de jurisdicción nacional, tuvo un mensaje claramente dirigido al gobernador Daniel Scioli. “Es lindo sonreír siempre y decir a todo que sí”, afirmó, apelando a “hacerse cargo”. En este punto también advirtió que “cuando uno le dice a todo que sí, llega un momento que después tenés que decirle a todo que no, porque te quedás sin nada para hacer frente a las obligaciones del Estado”. Al respecto opinó que Kirchner, como gobernador fue tal vez el que más hizo después de Gregores en Santa Cruz. “Hay que plantarse aunque no parezca simpático –continuó diciendo, como un mensaje a los administradores provinciales-, porque cuando uno se planta lo hace pensando en lo que le puede pasar al resto de la comunidad, que no se quede con el que te dije al aire”. “No se puede hacer eso con un país o una provincia”, sentenció y apeló también a los trabajadores y a los dirigentes sindicales.