Una unidad de la línea 109, que se dirigía hacia el micro centro porteño, se incrustó minutos después de las 8 de la mañana contra el frente de una estacionamiento del barrio porteño de Recoleta.
A raíz de la coalición 32 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, las cuales fueron trasladadas a los hospitales Fernández, Durán, Rivadavia y Ramos Mejía de la Capital Federal.
Según testigos el colectivero abandonó el volante para discutir con un pasajero que no le funcionaba la tarjeta magnética SUBE y no tenía dinero para abonar el pasaje.
Como consecuencia, el chofer se levantó de su lugar para increpar a la persona mientras la unidad se desplazaba por la calle Paraguay al 3.000, a la altura de Agüero, y el vehículo se subió a la vereda impactando contra el frente de un estacionamiento.
Al respecto, Alberto Crescenti, titular del SAME confirmó que el impacto «fue muy violento pero no hubo víctimas fatales» y que la mayoría de los heridos, entre ellos el chofer, presentaban politraumatismos de distintos tipo producto del choque.
Ahora, las calles Paraguay y Agüero, se encuentran interrumpidas al tránsito mientras los agentes a cargo del operativo de rescate finalizan con las tareas.