El ministro de Economía, Amado Boudou, dijo que con el Club de París «hay avances diarios» en las negociaciones para saldar la deuda con esa entidad. «Hay avances diarios en las reuniones por videoconferencia que lleva adelante el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino», explicó el titular del Palacio de Hacienda en diálogo con La Red.Además, aclaró que «en la semana pasada en la reunión del G-20 en París no se trataron cuestiones bilaterales».No obstante, aclaró que con el Club de París «avanzamos en temas de conciliación. Son 19 países con los que hay que conciliar todas las cuentas. Son muchos años de deuda impaga después del default», expresó.Dijo que «ahora lo que estamos empezando a diseñar es un mecanismo de plan de pagos, adecuado para la Argentina y aceptable para los acreedores».Al preguntársele si se acordó sobre el monto adeudado respondió que «todavía no» e indicó que «la posición del Club es conciliar el punto de vista de 19 países y eso le da una complejidad adicional. No es que uno concilia uno a uno con un acreedor».»La Argentina ya está acostumbrada. El desastre que nos dejó el default de (Adolfo) Rodríguez Saa, sirvió para que el Gobierno negocie en forma seria y dura como lo hicimos con los bonistas».Consultado sobre si hay países más duros en la negociación, dijo que «siempre pasa así. Fíjese que con los bonistas aún tenemos 3.000 millones en manos de fondos buitres que no quisieron entrar al canje. Lo importante es que para la Argentina la solución tiene que permitir que el país siga creciendo. Sino, no vamos a avanzar», acotó.En tanto, al referirse a la aplicación de licencias no automáticas para la importación de algunos productos, recordó Boudou que desde 2003 «venimos llevando a cabo políticas que tienden a preservar el empleo en la Argentina, con el programa de sustitución de importaciones y el programa de ampliación de exportaciones. Esto ha sido un camino que le ha servido al conjunto de los argentinos para tener más empleo».Consideró que «estas medidas tienen que ver con el cuidado del trabajo de los argentinos, con el cuidado del crecimiento» y se quejó de que «siempre se resaltan los conflictos» aunque aclaró que «siempre fueron mínimos, en rubros acotados y en montos acotados».