De acuerdo a los registros oficiales de la provincia, en 2013, Río Negro registró una tasa de mortalidad infantil de 10,7 fallecidos menores de un año cada mil nacidos vivos, acercándose a la media nacional que según datos aún provisorios estaría en el orden del 10,9.

Se trata concretamente de 123 niños menores fallecidos en 2013 contra 101 que fallecieron en 2012. Pero además, esta tasa confirma una tendencia creciente que se registra desde 2009.

En declaraciones a el diario viedmense Noticiasdelacosta, el secretario de Políticas Públicas de Salud, Daniel Manoukian, explicó que “ese aumento es básicamente a expensas de un incremento en la mortalidad neonatal, es decir de niños menores de un mes y por causas catalogadas como difícilmente reducibles”. 

En este marco, el funcionario aseguró que “identificamos este aspecto sanitario como uno de los principales desafíos para la gestión actual” y confió que “con los conocimientos actuales, los recursos disponibles y las capacidades de nuestros equipos de salud, es posible reducir esta tasa y conquistar más años de vida para los rionegrinos”.

Frente a esta situación, el ministerio de Salud de Río Negro acordó con su par nacional la implementación del “Plan Operativo para la Reducción de la Mortalidad Materno Infantil” que tiene por fin fortalecer la asistencia técnica, monitoreo y capacitación de los equipos hospitalarios, regionalizar la atención perinatal, optimizar la comunicación interna del sistema de salud en cuanto a registro y difusión de información estadística vinculada a maternidad e infancia y promover la participación comunitaria en la promoción de hábitos saludables para madres y niños. 

Manoukian expresó que el plan se implementará con limeamientos particulares que “surgirán de un proceso de planificación participativa donde todos los actores sociales serán convocados a diseñar las acciones necesarias para lograr los objetivos”.