Los presidentes de la Argentina, Cristina Fernández y de Bolivia, Evo Morales Ayma, descubrieron e inauguraron anoche la estatua en homenaje a Juana Azurduy, la generala que luchó por la emancipación del virreinato del Río de la Plata. Más tarde se ofreció una cena en honor a Evo Morales.

Después de la firma de acuerdos binacionales los presidentes de la Argentina, Cristina Fernández de Kirchner y su par de Bolivia, Evo Morales Ayma, descubrieron el monumento de la generala Juana Azurduy de Padilla.

Durante el acto se entonaron los himnos nacionales interpretados por la Sinfónica de mujeres del Colegio Militar de  la Nación; presenciaron un espectáculo del Ballet Folclórico Nacional de Bolivia y tras el descubrimiento del monumento y las placas recordatorias, Evo Moarales dirigió unas palabras de agradecimiento al pueblo argentino. 

«Siento una enorme alegría de estar hoy en la Argentina y ver una hermana, una abuela, una guerrillera de la independencia. Muchas gracias Cristina Fernández de Kirchner por este homenaje a la mujer luchadora», dijo y aseguró que «ésta es una forma de descolonizarnos, estamos en tiempos de liberación».

Tras el acto se dirigieron al Museo del Bicentenario donde se ofreció una comida en honor del presidente de Bolivia, Evo Morales.

Allí, el Presidente Evo Morales afirmó que en Bolivia «hay una gran emoción por el monumento a Juana Azurduy inaugurado hoy, que es una forma de descolonizarnos y seguir trabajando por nuestros pueblos»; «somos una gran familia sudamericana, una patria grande, y seguimos el proceso de liberación», subrayó.

Asimismo, destacó la importancia de la cooperación entre los países de Sudamérica «con un fuerte compromiso con nuestras bases», y detalló como ejemplo las transferencias de tecnologías entre los países como forma de fortalecimiento de la región.

Por último, Evo Morales envió su respeto hacia el Papa Francisco: «Un poco andaba decepcionado yo de la iglesia católica, hasta escuchar el mensaje del Papa», afirmó.

«Estamos bien políticamente, nos hemos liberado de la dominación de los EEUU y del FMI, sin embargo seguimos recibiendo permanentes amenazas, debemos seguir unidos», aseguró el Presidente de la República Plurinacional de Bolivia.

A su vez, la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, afirmó, en el mismo sentir de Evo, que «Juana Azurduy hoy en la plaza, mirando hacia el continente y mirando hacia la Casa de Gobierno, es una descolonización, no solamente cultural, sino intelectual y material».

Detalló además, que la obra se trata de una donación del Gobierno de la República Plurinacional de Bolivia.

«Si hubiera una palabra para definir los cambios que han gozado nuestras naciones es inclusión, pero no sólo la inclusión de los sectores más humillados, sino de todos los sectores, porque hay gente que consume también se está incluyendo a los comerciantes y empresarios», subrayó Cristina.

En esa dirección anunció que «acaba de convertirse en ley la movilidad de la Asignación Universal por Hijo», y destacó que según la CEPAL y el Banco Mundial, la Argentina es el país que más clase media ha creado en los últimos doce años.

«Se trata de una inclusión escalonada y piramidal, nadie puede tener éxito en la cumbre si no tiene bases sólidas que permitan ir ascendiendo, así que nadie se ponga nervioso cuando ven que los sectores vulnerables son incluidos, porque esos programas terminan impactando en los sectores más altos de la pirámide social», subrayó.

En cuanto a la estatua de Cristobal Colón, removida del predio donde hoy se inauguró la escultura de Juana Azurduy, la jefa del Estado aseguró que «va a estar en una plaza, mirando al río, porque todo forma parte de la historia».

Sin embargo, «el Papa Francisco pidió perdón por las cosas que habían sucedido en la época de la colonización y la evangelización», señaló la Presidenta y expresó: «algunos deberían aprender de sus palabras».

«Creo que hoy es un día muy feliz, la mejor conquista que nos puede hacer un hombre es asegurarnos el futuro de nuestros hijos y nietos, devolverle la dignidad al pueblo, como lo hace Evo», sostuvo.

Finalmente, la Mandataria ofreció un brindis por «la integración de la región como nunca se había visto, por el presidente Evo y todos los que lo acompañan, y por esa gran mujer, Generala de la revolución, Juana Azurduy, que al mirar a la Casa Rosada mira a todos los argentinos».

«Por la patria, por Bolivia, y por Argentina», expresó finalmente la Presidenta con su copa en alto.