Para la rectora del Instituto Universitario Nacional de Artes (IUNA), Sandra Torlucci, «poner el arte en un nivel universitario significa una revalorización de esta disciplina ya que coloca al artista en un mismo escalón que el investigador».

«La enseñanza del arte estuvo rezagada respecto a otras disciplinas y ésto, como hecho político, nos parece fundamental», explicó Torlucci.  

Según cifras del Ministerio de Educación, 54.224 jóvenes estudian arte en universidades, el 90% en las públicas aunque el aumento de la matrícula en institutos privados fue del 11,4% en los últimos diez años, superior al experimentado en los estatales.

En la última década «hubo una explosión en la demanda de educación artística», resaltó Torlucci y precisó que la sala de teatro del IUNA «pasó a tener de 80 alumnos en 2005 a 2.200 este año».

El Ministerio detalló que la mayor demanda se concentró en la Capital Federal y en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza en las disciplinas arte audiovisual, plástica, música, teatro y danza.

En los establecimientos públicos, la cantidad de estudiantes se repartió en forma equitativa en estas cuatro disciplinas, mientras que en los privados la gran mayoría se volcó a estudiar arte audiovisual. 

Para la rectora del IUNA, este crecimiento se explica no sólo en la diferente concepción de la educación artística desde el Estado, lo que se tradujo además en una ampliación del campo laboral, sino también en «una mayor apertura hacia los sectores populares. El arte dejó de ser patrimonio de la burguesía o de ciertas elites y dejó de desarrollarse en ámbitos cerrados», apuntó.

«Hay un enfoque del arte hacia la inclusión», subrayó Torlucci y añadió: «Se llega con el arte en los clubes, en los barrios, en Técnópolis también tiene un lugar» y «en las fiestas populares, en donde el arte está metido en todas las manifestaciones».

Si bien la mayor demanda a nivel público es en la ciudad y la provincia de Buenos Aires, hay casos curiosos como en Santa Fe, en donde la cantidad de estudiantes de música superan a los porteños y llegan a los 2.870, o en Córdoba, que tuvo en los últimos años un importante crecimiento de alumnos que cursan arte audiovisual.

Torlucci añadió que a diferencia de años anteriores «ahora las familias aceptan con más facilidad tener un hijo que se dedique al arte» y destacó que en el IUNA «se dio la paradoja que el momento de mayor demanda fue en 2001, en plena crisis económica y social de la Argentina».

«Hay muchos chicos que ya piensan dedicarse al arte desde el secundario e, inclusive, muchos que se deciden por carreras humanísticas, luego se enfocan hacia alguna disciplina artística» marcó y estimó que este crecimiento «está en condiciones de mantenerse porque existe inversión desde el Estado».

El Ministerio de Educación invierte a través del programa «Formarte» 12.704.749 pesos para el período 2014-2017 que se destina a infraestructura, formación, prácticas, intercambio docente y estudiantil, con un financiamiento anualizado de 4.254.419 pesos para las 144 carreras de arte en todo el país.

El Senado de la Nación analiza un proyecto que presentó el diputado Martín Gill (FPV) para que el IUNA pase a ser la primera Universidad de Arte del país e incorpore el posgrado de «Doctorado en artes», que reunirá la enseñanza de varias disciplinas.

Fuente: Telam