Durante el transcurso de la reunión, se analizó la situación de los productores que han sufrido el flagelo de los recientes incendios que hasta el día de hoy lleva afectadas, de acuerdo a lo informado por la Dirección General de Defensa Civil aproximadamente 370.000 hectáreas, superficie que ha perdido la oferta forrajera para la actividad ganadera así como gran parte de la infraestructura de los distintos establecimientos afectados.   El objetivo de la misma tuvo que ver con la posibilidad de diseñar herramientas de asistencia financiera urgente con características especiales destinadas a financiar la adquisición de forraje y la reposición de infraestructura.   Las autoridades del Banco de La Pampa señalaron que van a estudiar las opciones posibles así como la operatividad práctica para la atención de esta demanda específica.   Por otra parte, el subsecretario de Asuntos Agrarios mantuvo contactos con las autoridades del SENASA, más precisamente con la Coordinación Regional Temática de Sanidad Animal, a los efectos de brindar una atención especial a los productores damnificados de tal forma de facilitar rápidamente la movilización de hacienda sin desatender la parte sanitaria.