Con más de 400 animales y 80 especies, el Refugio Faunístico Luan de Neuquén, otra vez está al borde del cierre por los costos que implica el mantenimiento del espacio. Se trata del único lugar que recibe a animales peligrosos, de gran tamaño o directamente porque la gente no puede brindarles un lugar adecuado.

El comienzo fue en 1985 cuando Esteban y Marta Zupanovich (el matrimonio propietario y responsable del refugio) rescataron a una Guanaca a la que bautizaron “la Pancha” en Valentina Norte. Recuerdan que un personaje de la zona quería “comérsela a la parrilla”. Por defenderla, junto a Policía y guardafaunas, la pareja comenzó con el rescate de animales en el patio de su casa. Tras la visita de algunos colegios y ante la necesidad de regularizar el lugar, la reserva faunística LUAN abrió sus puertas al público en 1992.

Durante muchos años pidieron un terreno mucho más grande para poder brindarles comodidad a los animales. Tiempo atrás, el exintendente de Plottier, Sergio Gallia, les cedió 10 hectáreas en la zona de la Herradura. “El proyecto de La Herradura consiste en brindarle más comodidades a los animales y a quienes nos visitan. También la idea es forestar la zona. Un árbol necesita por lo menos 10 años y esa etapa está terminada”, manifestó Esteban.

En ese lugar llevan invertidos más de 1.200.000 pesos pero aún falta invertir medio millón más. Sin embargo, el matrimonio comienza a ver como una misión imposible lograrlo. Aseguran que las constantes promesas incumplidas los llevaron a analizar la situación como “una linda locura” que, ante los costos actuales de vida, resulta casi imposible.

“Por mes gastamos alrededor de 23 y 25 mil pesos. De la provincia no recibimos absolutamente nada. A ellos les gusta más Bubalcó. Los guardafaunas ni siquiera vienen a ver a los animales. Del municipio recibimos 7.500 pesos, pero con eso le damos de comer solamente a los 3 pumas, que consumen entre 10 y 12 kilos de carne por día”, indicó Esteban. Además, destacan el gran consumo de energía eléctrica que implica la reserva debido a que no hay agua corriente y necesitan de las bombas. “El mes pasado gaste 875 pesos de luz”, agregó.

Según explicó, uno de las formas en las que ingresa dinero a la Reserva es a través del arancel que se le cobra a visitantes ($20). “Nunca saqué la cuenta, pero creo que con eso sacamos entre 12 y 13 mil pesos”, detalló Esteban. El resto del dinero para completar el presupuesto mensual, lo pone el matrimonio de sus respectivas jubilaciones. Sin embargo, Esteban destacó la ayuda que reciben del supermercado Topsy ubicado en la calle Godoy, que colabora con verduras.

Sus hijos ya son mayores de edad, no viven con el matrimonio. Esteban confesó que no coinciden con la vida que llevan, aunque él destacó que lo hace por el amor que le tiene a los animales. “Vos le vas tomando cariño a los bichos, cuando tenés un animalito que nació acá, se integran a tu familia y vos pensás cual será su destino. Nosotros no somos amigos de los zoológicos. No compartimos la idea de comprar animales para que la gente los vea. No tiene sentido hacer eso. Nosotros queremos una reserva natural, para que la gente puede ver a los animales en su hábitat”, comentó.

Pero, para Esteban, después de muchos años de trabajo ya no alcanza el amor para sostener la situación de la Reserva. Confiesa que por la actual la situación económica no cree que puedan mantener el refugio más allá de fin de este año. “Nosotros queremos seguir, pero si no nos ayudan, o si no se concreta el apoyo económico que prometieron es muy difícil, los costos se te van”, confesó.

Esteban dijo que recibió decenas de promesas por parte de funcionarios, pero hasta el día de hoy, no se cumplió ninguna. “Alicia Comelli vino a mi casa y me prometió cemento, en ese momento valía $30, pero nunca lo cumplió. Todos se van contentos, se sacan la foto y después no te atienden el celular. Nanci Parrilli, Pechen, el mismo secretario de Cristina, Parrilli, los concejales de Neuquén o el ministro Bertoya, todos prometieron algo pero ninguno cumplió”, afirmó.

En el refugio se pueden encontrar con guanacos, ciervos colorados, pumas, liebres patagónicas (mara), tortugas terrestres y acuáticas, hurones, piches peludos, zorrinos, lagarto overo, víboras de variadas especies, chimangos, caranchos, águilas mora, loros barranqueros, aguiluchos, zorros grises, loritos habladores, palomas buchonas, mensajeras, de collar y abanico, pavos reales, patos, patos mudos, gallinetas, cotorritas australianas comunes y enanas, cocotillas , gallinas sedosas de Japón, faisanes de collar, lechuzas, jotes, cardenales, codornices, chanchitos de la india. Puede ser visitado tanto en verano, como en invierno a partir de las 8 y hasta la medianoche.