Política

Amenazan al denunciante por las escuchas ilegales

El hombre que disparó la causa del espionaje porteño presentó una denuncia por intimidaciones y no desestimó que su papel como testigo principal haya sido el desencadenante.

Sergio Burstein, miembro de la agrupación Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA, elevó a la DAIA una denuncia por amenazas que anteriormente radicó en el juzgado Federal de Norberto Oyarbide y que investiga el juez federal Rodolfo Canicoba Corral. También acusó a algunos portales de Internet de antisemitismo por cuestionar su condición de judío.Burstein explicó que la denuncia tiene que ver con la causa vinculada con la presencia de dos desconocidos merodeando en situación sospechosa, un local que él alquilaba sobre la calle Libertad.En principio, el dirigente judío recurrió al juzgado de Norberto Oyarbide, pero luego el caso fue a sorteo y recayó en el juzgado de Canicoba Corral y, coincidentemente, en la fiscalía de Jorge Di Lello, que también interviene en la causa por las escuchas.El hermano del principal testigo de dicha causa también había recibido, días antes, un mensaje por el portero eléctrico de su casa en el que le advertían: “Decile a Sergio que se deje de joder”.Luego de ratificar y ampliar este viernes su denuncia ante Canicoba Corral, Burstein se presentó en la DAIA para dejar constancia del caso, pero también para alertar sobre la existencia de mensajes antisemitas en determinados portales de Internet que lo cuestionaron por su condición de judío. “Después de hacer la denuncia comenté con gente amiga que estoy podrido de estar solo y fui a la DAIA, donde no solamente me atendieron muy bien sino que, además, se preocuparon y se ocuparon”, señaló, y remarcó que está preocupado por su integridad y la de su familia.Consultado sobre si estas amenazas están vinculadas con la causa de las escuchas telefónicas que involucran al ex comisario y ex jefe de la Policía Metropolitana, Jorge “Fino” Palacios, y al agente de inteligencia Ciro James, Burstein no desestimó tal relación, sino todo lo contrario. “No tengo ninguna duda, dijo. Estoy ciento por ciento convencido de que tienen que ver con las escuchas. Durante 15 años nunca se ocuparon de saber quién era Sergio Burstein, pero hoy, casualmente a partir del tema de las escuchas, soy la peor persona del mundo”, agregó.Cuando Burstein se encontraba de viaje en EEUU junto a la presidenta Crsitina Kirchner, un llamado de su hija lo alertó sobre la intervención a una de sus líneas telefónicas. Ese fue el disparador que actualmente pone en situación comprometida al mismo jefe de Gobierno, Mauricio Macri, procesado por Oyarbide, magistrado que lleva adelante el expediente del caso de las escuchas ilegales.