Allí explicaron que la huelga de hambre iniciada hace casi tres semanas «se debe a la lucha por el cumplimiento de las leyes de urbanización de las villas, con radicación de los actuales habitantes, así como al pedido de declaración de la emergencia habitacional, socio ambiental, socio sanitaria y socioeducativa» de estos barrios, señalaron los organizadores.

Además, denunciaron «la insensibilidad del gobierno de la Ciudad y del jefe de Gobierno Mauricio Macri, que no ha dado ninguna muestra de diálogo con los manifestantes de la Corriente Villera Independiente».

La reacción de la gente frente a estos espacios informativos «fue muy positiva», contó a Télam Julián Bokser de la Corriente Villera Independiente La Dignidad, quien valoró «el apoyo de las personas a nuestros reclamos».

Su agrupación junto a Marea Popular, la Poderosa, el Frente Popular Darío Santillán, Corriente Nacional y el Movimiento de Trabajadores Excluidos, se distribuyeron en 100 lugares claves de la Ciudad.

«Muchas personas sabían de nuestros reclamos gracias a nuestra lucha desde la Carpa y además, más allá de la cuestión sectorial, el tema tierra y vivienda es algo que nos atraviesa como sociedad», destacó Bokser.