La iniciativa de la presidenta Cristina Kirchner para instalar dos monumentos en homenaje a los ex presidentes Juan Domingo Perón e Hipólito Yrigoyen en la Ciudad de Buenos Aires generó nuevamente diferencias con el Gobierno porteño de Mauricio Macri y también con el radicalismo.
Luego de la larga pelea entre Ciudad y Nación por el traslado de la estatua de Cristóbal Colón, una nueva disputa parece iniciarse.
Macri sostuvo que la mandataria tuvo una “muy buena idea”, pero se mostró en contra de instalar las estatuas sobre la 9 de Julio, a ambos lados del Obelisco, tal como propuso la mandataria al anunciar el proyecto.
“Es una muy buena idea de la Presidenta, lo que hay que discutir bien es dónde los ponemos”, dijo el jefe de Gobierno y destacó que su gestión buscó “invertir” en la zona sur de la Ciudad y que, en ese contexto, ese debería ser el lugar para homenajear a los ex presidentes.
“Pongamos los monumentos en el sur, vistamos el sur”, propuso Macri en declaraciones radiales.Pero también el radicalismo se hizo oír y hay opiniones enfrentadas dentro del partido.
Si bien Macri se mostró a favor, pero con matices, la UCR cuestionó de plano el anuncio, por considerar que la propuesta forma parte de un “culto al personalismo”, como lo manifestó el jefe del bloque de senadores, Gerardo Morales.
Morales sostuvo que el partido está “de acuerdo en seguir los ejemplos de ambos líderes, Yrigoyen y Perón, pero en el Gobierno hay un culto al personalismo” y “los gobernantes tan personalistas terminan inaugurando sus propias estatuas”.
“Otro gran ex presidente, Raúl Alfonsín, pregonaba que sigamos ideas y no personas, porque justamente lo más importante es reivindicar lo colectivo y no lo individual, fortaleciendo los partidos políticos y no solamente a sus jefes”, afirmó Morales.
Además, fuentes de la cúpula de la UCR indicaron que el anuncio fue tomado por algunos dirigentes como una “maniobra electoralista” por parte del Gobierno, aunque la última palabra la tendrá la Legislatura porteña (donde el PRO es primera minoría), que deberá votar a favor o en contra de la construcción de monumentos y decidir su ubicación.
Desde el parlamento porteño, el Vicepresidente I del Cuerpo, Cristian Ritondo, ya se refirió al tema y recordó que en la Ciudad ya se está preparando otro monumento para homenajear a Perón, a partir de un proyecto que fue aprobado por unanimidad a mediados de mayo.
En ese sentido, el ex senador nacional Leopoldo Moreau -distanciado del Comité Nacional de la UCR- pidió que “el bloque mayoritario en la Legislatura porteña reflexione y no se deje ganar por mezquindades políticas”.
“Creo que los bloques de la Legislatura porteña deberían expedirse rápidamente para no dejar duda acerca de la voluntad unánime de las fuerzas políticas en el sentido de avalar esta propuesta del Gobierno nacional”, agregó Moreau.
Para el dirigente radical, “promover la instalación por separado de los bustos de Hipólito Yrigoyen y Juan Domingo Perón desarticula, conceptualmente, una propuesta que no sólo viene a plasmar una síntesis entre democracia y justicia social, sino también a representar, simbólicamente, a las dos grandes corrientes del pensamiento nacional”.