Hasta el momento, los imputados son Guillermo Heyaca Varela, el ingeniero a cargo de la obra lindera al gimnasio; Daniel Alberto Menta, que forma parte del directorio a cargo de dicha construcción, y José Pataro, dueño de la empresa de excavaciones. El hecho está caratulado como «homicidio culposo». Pero para la querellante, tanto quienes estaban a cargo de la obra lindera, que habría provocado el desmoronamiento del edificio, como el dueño del gimnasio, que permitió el ingreso de sus clientes, y las autoridades gubernamentales, que no ejercieron el control, tienen responsabilidad por la muerte de su hijo.El abogado patrocinante, Fernando Burlando, entiende que los funcionarios porteños son los más comprometidos y considera que fueron «negligentes» a la hora de controlar la obra en construcción lindera. Horas después de que las tres víctimas fueron halladas, las autoridades porteñas habían echado a un funcionario y suspendido las obras a cargo del ingeniero imputado.La familia de Luis Lu, el estudiante de Derecho de 23 años que también fallecido, pidió justicia, aunque todavía no puso en marcha el camino judicial.