Cuatro personas que están acusadas de regentear una red de trata que explotaba sexualmente a travestis en las ciudades de Cipolletti y Neuquén serán trasladados a la Unidad de Detención de Ezeiza del Servicio Penitenciario Federal y permanecerán en prisión por los delitos de explotación económica de la prostitución ajena, trata de personas con fines de explotación sexual, reducción a la servidumbre y lesiones graves.
Así lo determinó el Juzgado Federal N°2 por pedido de la fiscal María Cristina Beute, quien manifestó el riesgo de que los acusados puedan obstruir la investigación amedrentando a las víctimas.
Tras una investigación de más de dos meses, la Delegación Neuquén de la Policía Federal obtuvo las órdenes para realizar una serie de allanamientos que sirvieron para desarticular una red de trata que obligaba a 12 travestis a prostituirse. El mercado que acaparaba con fines de explotación sexual tenía visibilidad sobre las Rutas 22 y 151.
En la causa están imputados la proxeneta, su marido y dos travestis que colaboraban en la explotación sexual. La líder, apodada “Mamucha”, era la que captaba a las jóvenes de entre 20 y 30 años -algunas oriundas de San Juan y Mendoza- y, tras obligarlas a trabajar en determinadas paradas de las rutas 22 y 151, les cobraba una “plaza” o canon.