«Seguremos trabajando con la convicción y la dignidad con que asumismos todos nuestros copromisos», afirmó el Canciller, quien declaró: «No caeremos en las trampas de los fondos buitres ni de sus socios locales».

Dijo que «si antes de 2003 no había embargos era simplemente porque se seguía endeudando  internacionalmente».

Héctor Timerman leyó una declaración ante periodistas en el Salón de los Pensadores de la Casa Rosada donde dio a conocer la lista de bienes y cuentas del Estado argentino que desde el 2003 sufrieron bloqueos o embargos merced a la acción de fondos buitres, y tras detallar que cada uno de ellos fue recuperado,  reiteró que el Gobierno «no negociará» con ellos.

«Vamos a recuperar la Fragata, como lo hicimos con todos los bienes del Estado» antes embargados, afirmó, luego de haber mencinado que habían sido bloqueados en distintos momentos la Casa de San Martín en la ciudad francesa de Boulogne -Sur-Mer; sedes de embajadas y consulados en Estados Unidos, Alemania y Bélgica, entre otras, y  cuentas del Banco Central y del Banco Nación también en diversos países, la mayoría bloqueados por el mismo «fondo buitre» NML Capital, que trabó a la nave insignia argentina en Ghana desde hace casi 20 días.

«El embargo de las Fragata -puntualizó- no es tema aislado: es un importante episodio de una larga serie conflictos internos y externo generados a partir de la dictadura cívico militar que comenzó el 24 de marzo de 1976″, afirmó Timerman,

Detalló que «desde ese año y hasta el colapso del 2001, los distintos gobiernos impulsaron políticas de debilitamiento de la soberanía legal del país y se firmaron 58 tratados bilaterales que obligaban a la Arentina a aceptar sistemas judiciales extranjeros», cosa que, acotó, «Brasil jamás hizo».

Afirmó que «desde la asunción de Néstor Kirchner en el 2003 se decidió hacerse cargo del default y del colapso económico financiero, sin renunciar a la soberanía y a la dignidad y utilizando todas las herramientas legales vigentes».

«Desde el año 2005 al 2010 se renegoció el 93 por ciento de la deuda externa y quedó sólo el 5 por ciento restante en manos de fondos que se dedican a extorsionar con métodos usureros para exigir pagos fuera de toda lógica», agregó Timerman.

«Néstor Kirchner se negó a negociar y dio batalla contra ese acoso», recordó.

Indicó que desde el 2003 se soportaron embargos sobre 28 bienes y cuentas argentinas en el exterior, algunos de ellos «simbolos que reflejan identidad nacional, como la Casa de San Martín que estuvo embargada durante un año hasta su total libertación».

Dijo que «en todos los casos los abogados del Estado junto al Gobierno trabajaron con verdadera vocación de servicio como ahora lo hacemos con la Fragata».

Recordó que en los Estados Unidos se embargaron en su momento 12 propiedades del estado argentino, entre ellas las residencias de los embajadores acreditados ante el gobierno de ese país y ante la OEA, las tres agregadurías militares, la residencia del agregado naval e Washington, el edificio de la misión argentina ante la OEA y cuatro galpones de la Fuerza Aérea, todo por demandas de los mismos fondos buitres que embargaron la Fragata».