El Gobernador de la provincia de San Juan José Luis Gioja se encuentra «estable y controlado», pero tendrá un proceso de recuperación «largo y complicado» tras el accidente aéreo que sufrió hace un mes y medio, porque «el problema que tiene en el abdomen no es fácil» de resolver, según informó su hijo Gastón Gioja.

Luego de ser derivado en avión al porteño Hospital Italiano para continuar con el tratamiento de rehabilitación y acelerar su recuperación tras las heridas que sufrió cuando cayó el helicóptero en el que viajaba, su hijo detalló esta mañana que Gioja «tiene pequeñas febrículas, que no llegan a ser fiebre».

En tanto, sostuvo que ve «muy bien a su padre» y «con muchas ganas de vivir y de ponerle todo lo que tenga que ponerle para salir adelante», pero advirtió que la recuperación «no será fácil».

«El tiempo de recuperación es largo. Son procesos complicados. Así que nos tenemos que llenar de paciencia y esperar», explicó el hijo del mandatario provincial, quien ayer acompañó a su padre en el avión sanitario que lo trasladó desde San Juan a Buenos Aires, junto a dos médicos terapistas.

También llegaron a esta capital, la esposa y la hija del gobernador sanjuanino, quienes viajaron en un vuelo privado.

Pronóstico reservado

Gioja permanece en terapia intensiva con pronóstico reservado desde hace 44 días, cuando se desplomó el helicóptero oficial en el que viajaba junto a su secretario, Héctor Pérez, y los diputados nacionales Daniel Tomas y Margarita Ferrá de Bartol, quien falleció como consecuencia de las graves heridas. La familia decidió el traslado luego de la visita que realizó el sábado el especialista Juan Eduardo San Román, jefe de la Terapia Intensiva del hospital porteño, quien recomendó que se lo derive para «acortar plazos» de recuperación.