«Estuve hablando 2 horas 45 minutos. Tengan piedad de mí», fueron las primeras palabras de la Presidenta, al subirse al palco montado en las afueras del Congreso.
En su mensaje a los militantes, la mandataria repitió algunos conceptos de los que brindó en su alocución ante los legisladores y destacó especialmente «la recuperación de YPF para todos» así como los informes de organismos multilaterales que reconocen el crecimiento de la economía argentina y la campaña de «Precios cuidados».
«Los discursos dejan de ser palabras para convertirse en realidades», destacó la mandataria y pidió a todos los argentinos que se organicen para «cuidar sus bolsillos; no permitan que les robe nadie».
En ese marco, dijo que «no hay que ir de malos modos, sino con educación» y llamó a «convencer a cada uno, inclusive con el que tenemos que discutir de que no nos cobre más, que lo que está haciendo es malo, también para él, que no va a tener nadie a quien venderle».
También destacó la presencia de los militantes jóvenes. «Ustedes son mi debilidad. Les veo la cara a ustedes y veo el futuro y presente de la patria», dijo y añadió: «Veo banderas del Che, Evita, Walsh, también sería bueno ver de Yrigoyen».
«Yo le pido a todos los argentinos que tengan partido o no, le caiga simpática la Presidenta o no la aguate, le pido que cuide su bolsillo, no permita que nadie le robe», dijo la Jefa del Estado.
«Esto requiere algo más por parte de toda la población: buenos modos, educación, y organización» para convencer a quienes remarcan los precios injustificadamente a que no lo hagan, dijo Cristina.
Llamó a explicarle a quien cobra de más que no sólo perjudica al consumidor sino que se perjudica a sí mismo, porque lo que garantiza el crecimiento es el mercado interno. «Hay que ser inteligente, y hay que ayudar a que todos comprender en que Argentina queremos vivir», señaló.
Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que el programa Precios Cuidados fue destacado por la Organización de Las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Además, la Presidenta inauguró dos esculturas de Lola Mora que originalmente formaron parte de la fachada del Congreso entre 1906 y 1916, pero fueron removidas porque los cuerpos desnudos representados en ella escandalizaban a la sociedad de la época. Las obras originales se encuentran emplazadas en la provincia de Jujuy.
Por último, exhortó a los manifestantes a «luchar fuertemente por la solidaridad con todos los pueblos de América del Sur y defender la integración latinoamericana».
«No renunciemos nunca a ello: paz, vida y democracia para toda América Latina», concluyó. «Paz, vida y democracia», finalizó la Primera Mandataria.