Luego de que el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, diera marcha atrás con los acuerdos salariales alcanzados en diciembre pasado con los efectivos policiales y penitenciarios, los uniformados encabezaron nuevas protestas en la provincia, en especial, en las ciudades de Gualeguaychú y Concordia.

En la ciudad del Carnaval del País, en la noche del sábado, personal de Policía y Servicio Penitenciario protagonizó una marcha frente a la Jefatura Departamental local, mientras que instalaron una carpa en la plaza central y, además, se movilizaron hasta el Corsódromo.

“No vamos a dejar nuestro lugar de trabajo, no queremos huelga, no somos sediciosos, queremos que el Gobernador cumpla con el acuerdo firmado”, dijo uno de los uniformados a El Día, quien acompañado por sus familiares repudió la decisión del Gobierno provincial de desconocer el acuerdo pactado a principios de diciembre por considerarlo hecho bajo extorsión.

“Somos una Policía que estudia, que se capacita pero lamentablemente tenemos que salir a la calle porque el Gobernador nos mintió, somos una Policía que trabaja, que está durante los 35 días del año para el pueblo de Gualeguaychú”, señaló una mujer ante la multitud.

En tanto, en Concordia alrededor de 100 personas entre policías y familiares se concentraron anoche en plaza 25 de Mayo tras recibir la comunicación oficial de que el acuerdo firmado en diciembre quedaba nulo.

La información disparó un gran malestar en la fuerza y, además de la manifestación del sábado, planean realizar nuevas medidas.

En diálogo con El Litoral, efectivos afirmaron que personal de civil recorrerá los negocios del centro para “hablar cara a cara con los comerciantes”, mientras que colocarán mesas en lugares como la peatonal o la costanera con la identificación de la policía de la provincia para conversar con la gente.

“Que sepa la verdad sobre lo que pasó el 8 de diciembre y explicarle por qué su policía tiene que estar en la plaza mendigando un sueldo, en lugar de estar con nuestra familia o reforzar la seguridad en las calles,” sostuvo un joven policía.

“El Gobierno nos defraudó, no sólo nos mintió a nosotros sino a la ciudadanía de Concordia y lo hizo en presencia de nuestros garantes, el Obispo, el presidente de la Centro de Comercio, y el titular del Centro de Empleados de Comercio”, lanzó uno de los uniformados.

Los policías locales sostienen que “esto no es un movimiento sedicioso, jamás nos levantamos en armas contra ningún jefe, es más, la agresión vino de adentro hacia afuera, ahora de victimarios pasaron a ser víctimas. La historia es así y merece ser contada”.

Carlos, uno de los voceros, aclaró que “no queremos volver a ese 8 de diciembre. La policía esta autoconvocada no por capricho, el convenio se firmó y nosotros cumplimos” y agregó que “nos quieren dividir, avasallar, vamos a seguir en pie de lucha porque esto recién comienza”.

Vale aclarar que en cada departamental de Entre Ríos se entregó un petitorio dirigido a las autoridades, el cual especifica: “atento a los hechos acontecidos y el incumplimiento contractual, solicitamos urgentemente una mesa de negociación donde estemos representados, con representación directa que nosotros designaremos, que se cumpla el convenio firmado por usted (Urribarri) porque se encuentra vigente en todas sus partes”.

Acuerdos nulos también en Chaco y Misiones

Los gobiernos de Chaco y Misiones tampoco pagarán los incrementos salariales acordados con la policía, ya que al igual que Urribarri, los mandatarios de esas provincias argumentan que los acuerdos alcanzados en diciembre pasado se negociaron bajo “extorsión”; en medio de los saqueos y hechos de vandalismo, con un saldo de más de 12 personas muertas.

  En dichas jurisdicciones se habían firmado incrementos salariales que llegaban al 50, por lo cual se estima que otros distritos se sumen a esta medida aludiendo que los acuerdos salariales se hicieron bajo presión.